Librería remata y regala ejemplares, no pudo sobrevivir a crisis por coronavirus en México

Se hacen largas filas para adquirir el material, le local cerrará sus puerta

Librería  A través del Espejo.

Librería A través del Espejo. Crédito: Agencia Reforma

MÉXICO – Ante la crisis sanitaria y económica que ha provocado la pandemia delcoronavirus, obligó a la dueña de la Librería A través del Espejo, ubicada en Álvaro Obregón 118, en la Colonia Roma, en la Ciudad de México anunciar  u cierre definitivo y el remate de su catálogo

Desde ese día, los lectores hacen largas filas afuera del establecimiento donde llegan a esperar hasta seis horas sólo para adquirir un ejemplar.

Selva Hernández López refiere que, aunque la librería tiene apenas 25 años, el oficio de librero lleva en su familia más de tres generaciones.

“El hermano de mi abuelita coleccionaba las primeras ediciones de Sor Juana; en esa época, en los años 40, a la Lagunilla llegaban camiones con libros antiguos”.

“Entonces, él compraba los camiones para buscar las primeras ediciones y lo demás lo vendía, y así empezó el oficio en la familia”, relata Hernández.

De los 13 hijos que tuvieron sus abuelos, 10 se dedicaron a la compra y venta de libros.

Su madre tuvo su primera librería en 1969 en Donceles, la segunda en Avenida Cuauhtémoc, hasta que, finalmente, llegaron a la Roma.

En sus mejores días, la Librería A través del Espejo se volvió un lugar de encuentro y llegó a tener hasta 120 mil ejemplares; ahora le quedan 100 mil, que esperan vender hasta el 30 de junio.

“Los más viejos son de 1600; por ejemplo, tenemos un Índice de Libros Prohibidos por la Inquisición, un álbum de María con más de 100 calcografías barrocas, mucha folletería que es, incluso, de 1,500 y algunas hojas de incunables mexicanos”, explica.

https://twitter.com/isidrocorro/status/1275148643943751686

El cierre de la librería, como de muchos otros negocios emblemáticos de la Ciudad, responde a que los arrendadores buscan aprovechar mejor sus usos de suelo y la propietaria de la librería no puede cubrir ya el arrendamiento, debido a que el local ha permanecido cerrado por la epidemia del coronavirus y se ve imposibilitada de cubrir una renta de 100,000 pesos (unos $4,300 dólares al mes).

“El dueño que heredó el local tiene otros planes. Antes de la contingencia, ya nos había pedido el local porque es un lugar de mucha plusvalía y ya tenía ofertas más altas para la renta”, dijo la propietaria de la librería.

“Es muy triste porque, finalmente, estos negocios son los que le han dado cara a la Colonia Roma y, al final del día, donde se abre una librería comienza a cambiar el entorno cultural de barrio”, finaliza Selva Hernández López.

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