Todo lo que debes saber de la dieta alcalina y sus inigualables beneficios
La acidez promueve deterioros significativos en la salud. Descubre el poder curativo de seguir una dieta alcalina, es clave en la prevención de enfermedades
El estilo de vida actual, los altos niveles de estrés y una alimentación deficiente son aspectos que se relacionan directamente con un aumento en los niveles de acidez del organismo. Lo cierto es que el cuerpo humano es un sistema complejo de equilibrios y es por ello que desde inicios del siglo XX especialistas en medicina natural se ha encargado de defender “estos equilibrios” y señalan que uno de los más importantes es el químico. El cual se refiere a la alcalinidad o acidez de los fluidos corporales, especialmente de la sangre.
En los últimos años los beneficios medicinales de seguir una dieta alcalina quedaron un poco en el olvido, sin embargo recientemente gracias a un trabajo de investigación realizado por el Centro de Investigación en Epidemiología y Salud de la Población del INSERM en París (Francia), abrió de nuevo a consideración la importancia del tema. Este estudio se realizo en un largo período de 14 años en 66,000 mujeres, en el cual los doctores descubrieron que una dieta rica en productos animales (es decir basada en un excesivo consumo en huevos, carne y lácteos) puede provocar una carga de ácido en el cuerpo. Esto es una de las principales consecuencias de un mayor riesgo en padecer diabetes tipo 2 y se debe a la reducción de la sensibilidad a la insulina.
¿En qué consiste seguir una dieta alcalina?
Con base en el descubrimiento del concepto equilibrio ácido-base del organismo se concluyó que existen dietas que tienden a alcalinizar o acidificar el pH de la orina, lo cual se deriva en diversas afectaciones para la salud. A la vez se ha comprobado la estrecha relación que existe entre los hábitos, el estrés y el tipo de alimentación, es decir un estilo de vida deficiente y poco saludable se relaciona directamente con un aumento en la carga de ácidos en el organismo. Esto se deriva en señales que se presentan con un sistema inmunológico débil, inflamación crónica y destrucción de la masa ósea.
La buena noticia es que la alimentación es la llave para alcalinizar el cuerpo y es más sencillo de lo que creemos. Seguir una dieta basada en plantas favorece este equilibrio, mientras que un alto consumo de lácteos y carnes se relaciona directamente con la acidez. ¿Por qué es importante? La respuesta es simple, la acidez promueve la aparición de enfermedades crónicas y degenerativas como la osteoporosis, diabetes y diversas alteraciones hormonales, inmunitarias y metabólicas.
El pH es la medida de la acidez o alcalinidad de un líquido y su significado es “potencial de hidrógeno”. Se mide en una escala del 0 al 14 y se clasifica bajo las siguientes categorías:
- pH neutro: Corresponde al 7.
- pH ácido: Corresponde a toda a aquella medición inferior al 7.
- pH alcalino: Corresponde a todo nivel superior al 7.
Los beneficios de la dieta alcalina:
Seguir una dieta alcalina se asocia con grandes beneficios medicinales, sobre todo porque resulta clave en la prevención de enfermedades. Una de sus más extraordinarias bondades se debe a su potencial para mejorar las siguientes cuestiones de salud:
- Reduce el riesgo de padecer osteoporosis, cuando el organismo se acidifica recurre a las reservas de calcio.
- Equilibra al sistema hormonal, desde la hormona del crecimiento, potencia el funcionamiento cognitivo e influye en la secreción de hormonas gracias al magnesio.
- Reduce el riesgo de padecer diabetes, seguir una dieta alcalina previene la acidosis crónica metabólica que se deriva en la resistencia a la insulina y luego a la diabetes tipo 2.
- Previene y ayuda a tratar el cáncer, esto se debe a su aporte en alimentos alcalinos y antioxidantes.
- Equilibra la presión arterial, gracias al abundante aporte en potasio de frutas y verduras.
- Reduce el riesgo de padecer infecciones en vías urinarias y riñones.
- Mejora los niveles de energía y estado de ánimo.
- Conduce a un peso saludable y sobre todo a un mejor estilo de vida, que se asocia con la longevidad.
¿Cómo empezar una dieta alcalina?
Una de las grandes bondades de la dieta alcalina, sin lugar a dudas es lo fácil que es integrarla como parte de un nuevo estilo de vida. Por el simple hecho de seguir una dieta rica en abundantes frutas y verduras de temporada se logra acalinizar la orina. Esto es recomendable para cualquier persona.
Otro punto importante es vigilar el óptimo consumo de proteínas y optar por el consumo de las fuentes vegetales permitidas. A la vez resulta clave priorizar el consumo de alimentos alcalinos que en su mayoría son todas las variantes de frutas y verduras.
Algunos ejemplos de los alimentos alcalinos más populares: acelgas, melón, aceite de oliva, trigo sarraceno, aguacate, plátanos, bayas de goji, zanahorias, ajo, brócoli, uvas, piña, brotes de alfalfa, limón, coles de Bruselas, chucrut, coliflor, algas marinas, toronja y naranja, quinoa, perejil, mango, espinacas y papaya. A la vez resulta importante no comer en exceso, llevar una vida relajada libre del estrés y enojos, realizar actividad física diaria y no sobre cocinar los alimentos.