Vendedores ambulantes exigen al Concejo Municipal aprobar más permisos de venta en calles de NYC
Trabajadores y líderes políticos hicieron un llamado para que pronto se someta a votación el proyecto de ley 1116, que autoriza nuevas licencias y acabaría con el acoso policial que denuncian trabajadores
Cientos de vendedores ambulantes, activistas comunitarios y líderes políticos de la Gran Manzana se dieron cita este jueves cerca de la sede de la Administración Municipal para exigir al Concejo Municipal y al alcalde Bill de Blasio que los tome en serio y por fin resuelvan el problema de la falta de permisos para trabajadores ambulantes, que no se emiten desde 1983.
Con pancartas y arengas con las que exigían respeto a la labor que ejercen como trabajadores esenciales y pidiendo que se les dé un trato digno, los manifestantes hicieron un llamado para que a la brevedad posible, se someta a votación y se dé luz verde al proyecto de ley 1116, que autoriza la emisión de nuevos permisos de venta ambulante.
“Es lo único que pedimos, que nos dejen trabajar y que no nos traten más como si fuéramos criminales. Si no tenemos permisos es porque no los dan desde hace casi 40 años. ¿Cómo hacemos entonces para poder vivir y más en medio de la pandemia? No es justo que nos tengan así”, aseguró la vendedora de churros María de la Cruz, quien se gana la vida en las estaciones del metro, y quien pidió que la policía les dé una tregua.
“Nosotros somos gente decente, gente honesta y trabajadora y a cada rato nos persiguen como ratas, nos ponen tickets carísimos que al pagarlos nos quedamos sin para comer”, agregó la ecuatoriana, madre de tres niños.
Proyecto de ley estancado
La concejal Margaret Chin, proponente del proyecto de ley que lleva dos años dando vueltas en el Concejo, pidió a ese organismo que lo someta a votación y ayude a los ambulantes, mayormente inmigrantes.
“Ya es hora de aprobar esta ley. Es hora de dar más permisos. En esta pandemia los trabajadores ambulantes no recibieron ninguna ayuda ni federal, ni estatal ni de la Ciudad y con sus ventas muchos de ellos ayudan a otros neoyorquinos de bajos ingresos. Tenemos que hacerles justicia”, dijo la concejal, quien advirtió que la iniciativa cuenta con el apoyo de 40 concejales.
El concejal Carlos Menchaca, quien respalda la propuesta de ley, criticó la falta de acción del alcalde De Blasio para resolver el problema de la falta de permisos, pero advirtió que incluso sin su respaldo, pronto la ley saldrá adelante
“Tengo confianza de que vamos a pasar por fin esta ley, porque las voces en apoyo de nuestros vendedores ambulantes siguen creciendo y espero que pronto se aprueben no solo cientos de permisos nuevos, sino protecciones a su salud y su integridad”, dijo el presidente del Comité de Inmigración del Concejo. “El Alcalde debería enfocarse en esta ley. Lastimosamente es un alcalde que no se enfoca en las causas de los inmigrantes ni de los trabajadores esenciales, pero no lo necesitamos, porque tenemos la fuerza del Concejo Municipal para aprobar esta ley y con él o sin él, la vamos a pasar”.
La senadora estatal Jessica Ramos, quien en el 2019 introdujo en la Legislatura estatal un proyecto que quita el límite de permisos de venta ambulante que se otorguen por año para que todos los comerciantes puedan tener acceso a estas licencias, dijo que es hora de quitar el rótulo de trabajador ilegal a los ambulantes que se ganan la vida dignamente.
“Llevamos décadas en esta lucha para ayudarle a los vendedores ambulantes, pero dentro de esta pandemia, hemos visto que más de nuestros vecinos están acudiendo a este tipo de trabajo, que es honesto,para poder ofrecer un mejor futuro a sus familias y es hora ya de que se resuelva“, dijo la política de Queens. “Ojalá que se entienda por fin la necesidad urgente de despenalizar a los vendedores ambulantes, ya que no hay lógica para que exista un límite de permisos cuando todas las personas que deseen tener un tipo de negocio deberían ser apoyados”.
El Defensor del Pueblo, Jumaane Williams, criticó que la Policía persiga a los vendedores ambulantes y le emita multas, y pidió que se cambie la visión de seguridad pública que se ha tenido por años y que criminaliza a minorías y trabajadores inmigrantes.
Solo 4,000 permisos desde 1983
En la Gran Manzana desde 1983 solo existen unos 4,000 permisos de venta ambulante en total y 5,000 licencias para venta de comida, que resultan insufientes, cuando la población de Nueva York ha crecido considerablemente en las últimas cuatro décadas.
“A pesar de sus contribuciones fundamentales para mantener la ciudad de Nueva York en funcionamiento, los vendedores ambulantes han sido excluidos de los esfuerzos de ayuda a las pequeñas empresas y muchos luchan por sobrevivir”, aseguró el Street Vendor Projet del Centro de Justicia Urbano que aboga por los ambulantes, criticando que se haya tendido la mano a otros sectores y a los más vulnerables no. “La Ciudad extendió un salvavidas a aproximadamente 10,000 restaurantes, permitiendo la expansión en calles y aceras a través del programa de comedor abierto, pero al mismo tiempo, los vendedores ambulantes están siendo multados con cientos de dólares por infracciones administrativas menores por operar en lugares similares”.
De aprobarse la nueva ley, se crearía una Oficina Civil de Cumplimiento de los Vendedores Ambulantes, que ampliaría la disponibilidad de permisos de vendedores de alimentos y sería la encargada de hacer cumplir las leyes. Asimismo, se crearía una junta asesora de vendedores ambulantes y se emitirían unos 4,000 nuevos permisos en un período de 10 años.
Un vocero del presidente del Concejo Municipal, Corey Johnson, aseguró que el líder político es consciente de la importancia que tienen los vendedores ambulantes para la economía y la ciudad, pero no reveló de manera precisa si hay un plan de impulsar la ley pronto o si la apoya.
“En un momento en el que nos enfrentamos a una grave crisis económica, los vendedores ambulantes ofrecen opciones de comida asequibles para los neoyorquinos, y los trabajos que proporcionan son un salvavidas para los inmigrantes neoyorquinos”, aseguró Juan Soto, del Concejo Municipal. “(El Presidente del Concejo) está trabajando para encontrar formas de ayudar a esta industria vital”.
La Administración De Blasio no respondió nada sobre las quejas de los vendedores, pero el NYPD manifestó que están en un proceso de transición para que otras entidades asuman el control de cumplimeinto de la ley con los ambulantes y no ellos.
“El Departamento de Policía de Nueva York está trabajando actualmente con la Oficina del Alcalde para hacer la transición de la responsabilidad principal de hacer cumplir la ley de los vendedores”, aseguró la Sargento Jessica McRorie, vocera de la Uniformada. “Hemos disuelto el grupo de trabajo de vendedores ambulantes del NYPD. Sin embargo, mientras otras agencias de la Ciudad están haciendo la transición a funciones de cumplimiento de vendedores, el NYPD continuará respondiendo a las solicitudes de servicio 311 y llamadas al 911 relacionadas con los vendedores”.
Detalles de la propuesta de ley:
- La ley ampliaría gradualmente la cantidad de permisos para vender alimentos en las calles y aceras de la ciudad
- 400 nuevos permisos por año se otorgarían entre el 2021 y el 2029 hasta llegar a 4,000 o más.
- Para evitar el llamado mercado negro, donde propietarios de licencias las rentan por sumas elevadas de hasta 30,000 anuales, se exigiría que al menos un titular de la licencia de supervisión esté presente en un carrito en todo momento
- La policía no tendría que lidiar con los vendedores ambulantes, sino que sería la nueva unidad de aplicación de la ley dedicada a la venta la que haría cumplir exclusivamente las leyes de venta
- También se crearía una junta asesora de vendedores ambulantes, que incluirá vendedores, pequeñas empresas físicas, representantes de grupos comunitarios, sindicatos, propietarios y agencias de la ciudad, para examinar las reglas existentes
- $71,2 millones en impuestos para la Ciudad es el estimado que actualmente pagan los negocios ambulantes.