5 modos de comenzar con un huerto en tu casa (aunque no tengas jardín)

La tendencia de los huertos en casa llegó para quedarse, cada vez son más personas interesadas en cultivar sus propios alimentos, frescos y libres de químicos. La idea a primera vista enamora, sin embargo el impedimento más común para llevarla a la práctica es la falta de espacio en la mayoría de viviendas de las grandes ciudades. Muchos se preguntarán si es posible tener un huerto en un departamento o casa pequeña, la respuesta es: ¡sí, por supuesto que sí!

Todo es cuestión de determinación y algo de paciencia, pues los asuntos de la naturaleza suelen llevarse su tiempo. Más que una moda, es de considerarse que tener un huerto en casa podría ser de gran ayuda para algunos de las grandes problemas de la humanidad, como el desabasto de comida. Esto es algo que quizás no afecte a todos, pero es bien sabido que la producción de alimentos a grandes escalas causa estragos ambientales, además de dejar su huella de carbono, por el traslado de productos utilizando diversas vías de transporte, que sí o sí generan contaminación.

Ya sea por conciencia ecológica, interés por la salud, terapia ocupacional, decoración o la razón que sea, iniciar un huerto en casa es un proyecto que requiere poca inversión y promete resultados que bien valen el esfuerzo.

Pues bien, manos a la obra. Lo primero es ubicar un lugar con luz y circulación de aire, puede ser junto a una ventana, en un balcón, en un pequeño patio de servicio, en fin, no se requiere un área muy grande para instalar el huerto. Aquí te damos 5 opciones para aprovechar cualquier espacio disponible de tu vivienda y convertirlo en tu huerto personal.

1. Espacio mínimo

Si no tienes previa experiencia y sólo cuentas con una pequeña repisa o espacio junto a una venta, se recomienda comenzar con hierbas aromáticas. Romero, tomillo, orégano, albahaca y menta son algunas de las más comunes, si se les brinda el cuidado necesario proveerán de nuevos brotes por tiempo suficiente para destinarlas al uso que mejor convenga.

2. Pared

Ahora bien, si cuentas con una pared que igualmente se encuentre cerca de una fuente de luz o mejor aún, reciba los rayos directos de sol por algunas horas al día, este es un espacio que no debes desaprovechar. Ya sea en macetas independientes, una jardinera vertical construida con material reciclado o incluso bolsas de tela resistente, cualquiera de estas opciones es útil para instalar un pequeño huerto con más planta aromáticas y quizás algunas flores.

3. Terraza o balcón

Existen hortalizas que necesitan una estructura para apoyarse y crecer, como el caso de los tomates. Si tienes un pequeño espacio junto a una pared, una protección o alguna estructura sólida y con buena luz, ese espacio se puede utilizar para tener una jardinera en la cual sembrar tu propio alimento.

4. Patio de servicio

Quizás tengas un patio en el que puedas disponer de una esquina o una pared para instalar macetas o una jardinera. Existen muchas plantas que no necesitan gran espacio para prosperar, siempre y cuando las condiciones de luz y aire sean las óptimas. Lechuga, rábanos, zanahorias, vegetales de hojas verdes, en fin, te sorprenderás lo que se puede lograr en un metro cuadrado con 30 cms, de profundidad.

5. Cero espacio libre

Si no cuentas con ninguna de las alternativas mencionadas, no te desanimes, los germinados y brotes son tu mejor opción. No necesitas nada más que un espacio dentro de tu casa donde puedas colocar una charola germinadora y listo. La cocina es el lugar ideal para esto pues te permitirá estar al pendiente del desarrollo de las semillas.

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