Qué son los germinados y cómo puedes incluirlos en tu dieta
Súper nutritivos, económicos, fáciles cultivar y de consumir
Los germinados día a día van ganando más popularidad y no es para menos, ya que tienen amplias ventajas que los posicionan como el alimento idóneo, principalmente porque se pueden cultivar en casa y a bajo costo. Sólo se necesitan semillas de buena calidad, agua, un pequeño espacio, bandejas y ya está, todo listo iniciar el proceso de germinación. Desde luego también se necesitará de con un poco de cuidado y medidas de higiene básicas.
En pocas palabras, un germinado es el momento en que bajo ciertas condiciones, una semilla se abre por primera vez y de la cual emana una raíz y/o un tallo. Existen tantos tipo de germinados como semillas pueda haber y al ser el inicio de la vida de una plata, contienen mayores concentraciones nutrientes que cuando se comparan con la planta completamente desarrollada.
Están vivos
Se les considera un alimento vivo, ya que literalmente son el inicio de una especie de vida. A diferencia de las frutas y hortalizas, que se cosecharon de una planta y después de cierto tiempo (que por lo general son días) están destinados a perecer. Los germinados pueden durar días y hasta semanas en el refrigeración, sin descomponerse ni perder sus propiedades.
Fuente de nutrientes
Contienen vitaminas, minerales, antioxidantes y enzimas que ayudan a proteger del daño causado por los radicales libres, de echo contienen un porcentaje mucho mayor de enzimas que las frutas y verduras.
Con respecto a este último componente, cabe destacar que justamente las enzimas son responsables de que el cuerpo humano extraiga mayores niveles de vitaminas, minerales y otros nutrientes de los alimentos en general.
5 razones para comenzar a consumirlos con frecuencia, si es que aún no lo haces
- Puedes cultivarlos todo el año en tu propia casa, aún en espacios pequeños.
- Su cantidad y calidad de nutrientes está por encima que el resto de plantas, frutas, verduras, hortalizas, granos, semillas sin germinar y frutos secos.
- Si se cultivan en casa son económicos y se puede controlar el grado de higiene en su manejo.
- Importante fuente de enzimas. Recordemos que entre más enzimas, mayor aprovechamiento del resto de nutrientes.
- Son de fácil digestión y su aporte calórico es mínimo.
¿Cómo consumirlos?
La mejor forma de consumirlos es crudos y desinfectados. Si deseas cocinarlos, se recomienda que no excedan de 3 minutos de cocción, pues se perderían buena parte de sus nutrientes.
Ahora bien, si llegaste a este punto con la seguridad de incluir los germinados a tu dieta pero no tienes idea de cómo hacerlo, te sugerimos algunas opciones de fácil preparación.
- Ensalada a base de cualquier germinado acompañada aguacate y aderezo de tu preferencia.
- Sándwich que queso con mucho germinado.
- Tacos (sin freir) de frijoles con germinado.
- Sopa de verduras, a la que una vez apagado el fuego se añadan los germinados.
- Licuado de hojas verdes con germinados.
- Salteados con salsa de soya.
En fin, todo es cuestión de creatividad y un poco de paciencia para acostumbrar al paladar a nuevos sabores y texturas, con el fin de obtener el máximo beneficio de este nutritivo alimento.
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