La MTA recibe luz verde para dar paso crucial para implementar la ‘tarifa de congestión’
El Gobierno federal permite realizar la evaluación ambiental que se necesita como paso previo para el plan
Luego de años de retrasos, la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) recibió este martes luz verde por parte del Gobierno federal, para que avance los estudios para implementar el sistema de ‘tarifa de congestión’, que permitiría cobrar un peaje a los conductores que ingresen a Manhattan desde la calle 60 y hacia el sur de la isla, como una medida que busca reducir el tráfico vehicular y recaudar ingresos.
La Administración Biden informó a la agencia neoyorquina, encargada de los sistemas de transporte público masivos como el Subway y autobuses de la Gran Manzana, que ya puede realizar la evaluación ambiental que se necesita como paso previo para implementar el programa de ‘congestion pricing’ que sería el primero de su tipo en el país.
La MTA había estado esperando por años que el Gobierno federal especificara qué tipo de revisión ambiental se debía realizar para poder avanzar el plan, pero la Administración Trump nunca lo hizo, una demora que los líderes de la MTA atribuyeron a una maniobra política “cínica”.
“Con esta guía sobre una evaluación ambiental ahora disponible, la MTA está lista para comenzar a ejecutar el Programa de Peaje del Distrito Comercial Central. Ya estamos trabajando en el diseño preliminar para la infraestructura y el sistema de peaje de las carreteras, y esperamos trabajar con nuestros colegas de la Administración Federal de Carreteras para llevar a cabo la revisión y una amplia divulgación pública para que podamos avanzar con el resto del programa tan pronto como sea posible”, dijo el presidente de la MTA, Patrick Foye.
La MTA aún no ha establecido un rango de precios para la tarifa de congestión, pero propuestas anteriores han recomendado cobrar de $12 a $14 por automóviles y $25 por camiones, aunque los precios fluctuarían según la hora del día.
El gobernador Andrew Cuomo indicó que la tarificación por congestión “es un método probado a nivel internacional para reducir la congestión del tráfico, mejorar la disponibilidad y confiabilidad del transporte público y mejorar la calidad del aire, y jugará un papel fundamental a medida que Nueva York y la nación comiencen a recuperarse de la pandemia y a reconstruir más fuerte y mejor que antes”.
El mandatario estatal agregó: “Este avance también es otro paso adelante en la generación de los $15 mil millones que el Estado necesita para financiar el Plan de Capital de cinco años de la MTA de $51.5 mil millones, que transformará la accesibilidad, confiabilidad y conveniencia del sistema para todos los usuarios”.
Los líderes de la MTA han enfatizado el importante papel que puede tener el plan para aliviar las consecuencias económicas de la pandemia de COVID-19. Según la ley estatal sobre la tarifa de congestión, se espera que el sistema genere $1,000 millones de dólares anuales, que se asignarán a proyectos de capital de la MTA.
Otro funcionario que expresó satisfacción con la decisión del Gobierno federal fue el alcalde Bill de Blasio, quien indicó que el transporte masivo “es el presente y el futuro de esta ciudad, y este día se debió haber alcanzado hace mucho tiempo. Agradezco a todos los defensores que pidieron un enfoque más inteligente para la congestión y un financiamiento más confiable para los trenes subterráneos y autobuses de nuestra ciudad”.
Una evaluación ambiental es un proceso mucho menos riguroso que la declaración de impacto ambiental a gran escala que el Gobierno federal también podría haber ordenado a la MTA realizar, que generalmente demora años en completarse. Esta decisión indica que la Administración de Biden está interesada en hacer avanzar el proceso lo más rápido posible.