La madre de las niñas halladas solas en la frontera rompe el silencio: “Con el dolor de mi alma las dejé ahí”
La hondureña Sandra Padilla explicó por qué decidió abandonar a sus niñas. Las autoridades las encontraron a pleno rayo del sol e indefensas
Hace ya una semana que un granjero de Texas encontró a cinco niñas de entre 7 años y 11 meses de edad abandonadas a su suerte en su propiedad. La madre de dos de las pequeñas habló desde México y explicó por qué dejó ir a sus hijas en compañía de otros adultos.
“Necesito que me ayuden porque quiero estar con mis hijas, yo nunca hubiera querido dejarlas ahí. Me dolió en el alma y Dios lo sabe”, dijo a Telemundo Sandra Padilla, madre de Nasley y Cristal, de 7 y 4 años de edad.
Las niñas se encuentran en custodia de las autoridades estadounidenses, que las pusieron a salvo tras encontrarlas en condiciones críticas y peligrosas para su salud.
“Nunca quise dejarlas ahí, Dios sabe que siempre le pedí a él que me las cuidara”, dijo.
“Con el dolor de mi alma las dejé ahí”.
De acuerdo a la versión de la centroamericana, las niñas viajaban con su esposo, su cuñado y la madre de otras de las niñas de nombre Daisy. De ellos nada se sabe.
La madre de Sandra vive en Houston, Texas, y también habló con la televisora hispana sobre la situación. “Imagínese ella ahorita está débil después de tanto caminar, sin comer y sin nada y no me puedo imaginar cómo se encuentra porque nunca había dejado a sus hijas”.
Sandra Padilla ahora pide al gobierno estadounidense ayuda para reunirse con sus hijas.
Dos de las cinco pequeñas habían sido secuestradas con su madre y golpeadas por criminales antes de que su familia pagara el rescate.
Una guatemalteca llamada Daisy, de 22 años, es uno de los padres que supuestamente están desaparecidos y de los que no se ha sabido en semanas.
Yolanda, hermana de Daisy, dijo a Univision que la joven había dejado la casa de su familia en febrero con su novio, un ciudadano hondureño, y sus dos hijas, Ashlei, de 5 años, y su hermana Valeria, de solo11 meses.
Daisy y su novio llegaron a México y compartieron una casa con Sandra Padilla. En marzo se registró el supuesto secuestro de Daisy.
En su secuestro Daisy y sus hijas fueron encerradas en una habitación, obligadas a desnudarse y fueron maltratadas por criminales. La familia pagó $3,000 dólares.
Según la familia, Daisy intentó cruzar la frontera pero fue asaltada por la policía mexicana.