Cómo ser feliz con uno mismo

Mientras para algunas personas estar en soledad es un disfrute, para otras estar consigo mismo puede convertirse en toda una tortura y en un motivo de tristeza

soledad

Aprender a estar solo genera bienestar mental y físico. Crédito: Pixabay

Particularmente en estos momentos cuando el año está a punto de terminar, nos planteamos instantes para reflexionar sobre el curso de nuestra vida y nuestro estado de ánimo. Aparejada con la depresión estacional que sufren algunas personas durante las fechas navideñas, otras encuentran que se sienten solas a pesar de estar rodeadas de personas. Si quieres algunos tips para ser feliz contigo mismo, esto te interesa.

Sentirse solo muchas veces no tiene nada qué ver con cuántas personas están a nuestro alrededor en un momento dado; podemos estar compartiendo un espacio con una multitud y, aún así, sentirnos solos. También podemos estar brazo a brazo con nuestra familia, nuestra pareja o con nuestros hijos y, de cualquier manera, sentir que el vacío de la soledad nos consume.

Pero aprender a estar solos y disfrutarlo es un indicativo de autoestima y cohesión de la personalidad. Los expertos en salud mental de Healthline sugieren algunas pautas para aprender a ser feliz con uno mismo.

No te compares

Si tu vida social no se parece a la de otras personas, trata de entender que no se trata de competir con nadie por amistades o conocidos: se trata de lo que te funciona a ti. Tener una agitada vida social no necesariamente te hará más feliz, así que valora las compañías que realmente suman a tu vida.

Desconéctate un poco

Si estás solo en un momento dado, guarda tu teléfono celular y olvídate de las redes sociales, al menos por una hora. En lugar de usar ese tiempo para espiar a tus contactos o a tus ex parejas, explórate a ti mismo o haz algo que disfrutes hacer como leer, meditar, hacer una caminata o escribir. También puedes anotar en una libreta lo que te gustaría hacer la próxima vez que estés solo.

Deja tu mente en libertad

La próxima vez que estés solo, experimenta a dejar que tu mente divague durante unos cinco o 10 minutos y observa hacia dónde te lleva. Es una especie de meditación, pero no tienes que sentarte en un lugar y quedarte inmóvil si no quieres; puedes hacerlo mientras lavas los platos o haces alguna otra actividad mecánica. Eso sí, en esos minutos olvídate de internet, de la TV, de los podcasts, los libros y la música.

Haz una cita contigo

Llévate a ti mismo a un restaurante, a tomar un café, a sentarte en una banca del parque o al cine, podrías incluso invitarte a una cena deliciosa en casa. Puede parecer extraño al principio, pero conforme lo practiques, cada vez te parecerá menos extraño pasar tiempo contigo mismo mientras realizas una actividad disfrutable.

Haz ejercicio

La actividad física activa neurotransmisores y hormonas en nuestro cerebro que nos ayudan a sentirnos mejor. Al menos una media hora diaria comenzará a cambiar tu química cerebral y tu bienestar. Si puedes hacerlo cerca de la naturaleza, mucho mejor: un bosque, un parque natural, la playa, son escenarios que favorecen la conexión contigo mismo y con nuestra esencia en el mundo.

Obviamente estos tips no cambiarán tu estado de ánimo de la noche a la mañana; es necesario practicar y explorar los cambios que irás experimentando al paso del tiempo.


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