Arrestan en Puerto Rico a uno de los más buscados y presunto líder de banda de sicarios o de asesinos a sueldo
Los contratos para asesinatos con los que se vincula a Rodney Santiago Ramírez, de 22 años, fluctuaban entre $5,000 y $10,000 dólares en la zona de Mayagüez, según la Policía en Puerto Rico
Rodney Santiago Ramírez, de 22 años, está acusado de múltiples asesinatos por contrato junto a otros pistoleros en el oeste de Puerto Rico. Crédito: Policía de Puerto Rico | Cortesía
SAN JUAN, Puerto Rico – Rodney Santiago Ramírez, de 22 años y uno de los hombres más buscados por las autoridades acusado de múltiples asesinatos por contrato junto a otros pistoleros en el oeste de Puerto Rico, fue arrestado el lunes, informó hoy la Policía.
Contra Santiago Ramírez, arrestado en la tarde de ayer en su residencia en Ponce, pesaban cuatro órdenes de arresto por cargos de asesinato, violaciones a la Ley de Armas y Vehículos Hurtados y dos órdenes de desacato criminal.
Tres de los asesinatos que se le imputan a Santiago Ramírez ocurrieron el pasado 27 de junio en Hormigueros, donde en común y mutuo acuerdo con otros sujetos, asesinó con varias armas de fuego a tres jóvenes, entre ellos, dos hermanos, y una mujer de 20 años.
Santiago Ramírez también está acusado de asesinar por encargo al principal ejecutivo de la empresa Flan-es-Cedó, Andrés Llama Díaz, perpetrado el 3 de agosto pasado, por encargo del hermano del empresario, Bernardo Llama Díaz.
Al ahora arrestado también se le imputa asesinar a Josué Hernández Colón, de 30 años, por una deuda de drogas el 16 de mayo en el sector Coloso.
Además, a Santiago Ramírez se le acusa de asesinar por encargo a principio de junio del año pasado, junto a otros individuos, a Jomar Montalvo Rivera, de 34 años, por un robo de drogas.
Otro asesinato que se le atribuye a Santiago Ramírez es el de Francisco Galarza Arvelo, de 65 años, el 22 de junio pasado, cuando el sobrino de la víctima contrató al ahora arrestado para asesinarlo y cobrar un seguro de vida a su nombre.
Santiago Ramírez es acusado junto a otros sicarios de estos múltiples asesinatos por acecho y por contratos que fluctuaban entre $5,000 y $10,000 dólares en la zona de Mayagüez.
A Santiago Ramírez se le había fijado una fianza global de $7.4 millones de dólares.
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