Bill de Blasio se despide defendiendo a capa y espada su legado: “Cerca de 500,000 neoyorquinos superaron la línea de pobreza”
En el 'autoexamen' del mandatario que gobernó a la complicada 'Capital del Mundo' durante los últimos ocho años, subraya que deja "avances históricos" a favor de la clase trabajadora
Era el año 2014 cuando Bill de Blasio se alzó con el triunfo en la Alcaldía de la Ciudad de Nueva York y en medio de la euforia del momento, su promesa central fue “luchar por las grandes desigualdades y facilitar el acceso a las oportunidades a los más vulnerables”.
Ocho años después y a solo horas de dejar el cargo, De Blasio en medio de un campo minado por la pandemia, la violencia criminal y la evidente crisis de desamparados de la ciudad, un cuadro que devela el otro drama de la vivienda asequible, compartió con los neoyorquinos el ‘autoexamen’ de su gestión.
“Hicimos grandes cambios para ayudar a las familias trabajadoras, a nuestros hijos y proteger a nuestra ciudad. Gracias a los neoyorquinos. Fue un honor servirles”, fue el mensaje central de su última rueda de prensa oficial como mandatario de la ciudad más poblada del país, para dar paso a la Administración de Eric Adams.
Antes de abandonar la sede de la Alcaldía y la Mansión Gracie, destacó que a pesar de los efectos devastadores de la pandemia en la economía, por “primera vez en la historia”, la tasa de pobreza en la ciudad de Nueva York está por debajo del 12.7%.
Esta apreciación en números más absolutos apuntan a que por lo menos 500,000 neoyorquinos salieron la línea de la pobreza, durante los años de su gestión, de acuerdo con un video de “despedida” difundido este viernes en redes sociales.
Los últimos meses de De Blasio en uno de los cargos más complicadas del país, estuvieron marcados por una avalancha de críticas y el peso que significa un cruce de varias encuestadoras, que en promedio califican en un rango entre 52% y 55%, una apreciación “negativa” de su gestión.
Aún así, no descarta en lo absoluto seguir presentando su nombre para otros cargos de elección popular, incluyendo la contienda por la Gobernación de Nueva York.
“Seguiré de ahora en adelante siendo lo de siempre, un servidor público”, acotó.
Por los neoyorquinos más pobres
Los dos periodos de gobierno del ahora exalcalde, en 2014-2018 y 2018-2021, estuvieron marcados por sus enfrentamientos políticos que rozaron incluso la arena personal con el exgobernador demócrata Andrew Cuomo y su tormentosa relación con el expresidente Donald Trump.
Y, además, el peso doloroso del COVID-19 que apareció en la primavera 2020 convirtiendo a la Gran Manzana en cuestión de semanas en el epicentro mundial de las muertes y el número de contagiados, aunado a la ruina económica que se afincó en la clase trabajadora y con más agudeza a los 550,000 inmigrantes indocumentados que forman parte de la vida de la ciudad.
En este último renglón, De Blasio sacó “banderas” en sus propios balances, para asegurar que puede ver a la cara a los neoyorquinos más pobres y los más vulnerables.
En el inventario personal de su administración, pondera que estructuró un plan de vacunación inclusivo y cercano a las comunidades, que en los peores momentos de la pandemia la red hospitalaria no discriminó a ningún residente de la Ciudad por su estatus migratorio o por no contar con seguro médico, también creó un plan de identificación ‘IDNY’ para dar algunas facilidades de integración a los ‘sin papeles’. Y puso en marcha el plan de seguro médico ‘NYC Care’.
Educación temprana gratuita
La línea más gruesa del discurso final del 109º inquilino del City Hall, en el Bajo Manhattan, se dirigió a subrayar su plan de Pre kinder y 3-K gratuito universal lanzado en enero del 2014.
“La Ciudad de Nueva York abrió el camino en el establecimiento de la educación temprana gratuita. Transformó las vidas de las familias trabajadoras en los cinco condados, brindando una ventaja inestimable en la escuela y la vida. Estoy encantado de ver al presidente Biden tomar lo que hemos logrado y desarrollarlo con un enfoque nacional. Las comunidades de todo el país sentirán el impacto invaluable de la educación temprana universal ”, destaca De Blasio.
Actualmente este programa se ofrece en 12 distritos escolares disponible para 40,000 niños de tres años en adelante sentando las bases para ampliar el acceso hasta el año 2023.
Se calcula que en promedio esto significa un ahorro anual de cerca $10,000 dólares para las familias de vecindarios más pobres de la Gran Manzana.
“La mera verdad es que De Blasio hizo cosas muy positivas para los más pobres y los que no votan, porque no tienen papeles. Toda esto hizo entender que somos una fuerza laboral que durante la pandemia mantuvimos en pie a la ciudad, cuando los más ricos podían trabajar en casa con una computadora”, comentó a El Diario Rocio Pérez, una mexicana indocumentada quien es activista de la organización Comunidades por un Cambio NY.
¿200,000 viviendas asequibles?
El otro capítulo de De Blasio en su paso por la Alcaldía, serán los planes de viviendas asequibles que fueron también parte de sus líneas programáticas cuando se asomaba como candidato al cargo.
En sus propias palabras, se va del cargo con un saldo de construcción de 200,000 viviendas asequibles, lo cual él mismo describió como “la mayor cantidad en una Administración en la historia de la ciudad de Nueva York”.
De acuerdo con su equipo, el 46% de esas viviendas sirven a los neoyorquinos que ganan menos de $42,000 por año o $54,000 para una familia de tres.
El plan de vivienda defendido por De Blasio deja el “camino listo para alcanzar su ambicioso objetivo de crear o preservar 300,000 viviendas asequibles para 2026”.
En este punto varias visiones de organizaciones y líderes electos han desestimado este logro, mostrando números y estadísticas muy distintas, que dan cuenta de la mayor crisis de vivienda asequible que muestra la ciudad de Nueva York, sin ponderar la “crisis humanitaria” que ha sido detalladamente descrita en los complejos de la Autoridad de Vivienda Pública (NYCHA) en donde el 90% de los edificios muestran fallas de infraestructura.
El exmandatario municipal cierra su propio balance asegurado que en “2014 estableció la meta más ambiciosa en la historia de esta ciudad para construir y preservar viviendas asequibles, y gracias a ocho años de arduo trabajo, lo cumplimos”.
“Eliminamos ‘Stop and Frisk’“
En materia de seguridad pública en sus últimas horas en el cargo, De Blasio no mencionó el tema de la violencia criminal que azota a las calles de la capital del mundo, aunque en semanas anteriores concluyó que uno de sus principales legados había sido “garantizar que la ciudad de Nueva York siga siendo la urbe superpoblada y más grande con menos criminalidad del país”.
Sin embargo, este viernes quiso demarcar que en cuanto al manejo policial, había puesto punto final a la controversial práctica de ‘Pare y Revise’ (‘Stop and Frisk’)
En este sentido, la conclusión de un reporte de la Sociedad de Ayuda Legal de Nueva York del pasado verano fue claro: la práctica policial de ‘Stop and Frisk’ que por décadas ha afectado a comunidades de color, tomó un nuevo aire en el 2020, en cuanto a su acción “desproporcionada contra los grupos minoritarios de la ciudad”.
Según datos compartidos por varias organizaciones, aproximadamente el 91% de los procedimientos de detención y registro informados el año pasado, involucraron a neoyorquinos de las minorías étnicas. Esto parece ser un ligero aumento con respecto al 2018 y 2019, según los datos que se derivan de las estadísticas divulgadas por el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD).
Lo que sí es claro es que el número de revisiones reportadas oficialmente se redujo de 13,459 en 2019 a 9,544 en 2020 y en más de 70% desde que asumió el cargo.
Los números del ‘autoexamen’ de De Blasio:
- 90% de la población adulta de la ciudad de Nueva York ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el COVID-19 desde que arrancó el plan de inmunización el pasado 15 de diciembre de 2020.
- 1.4 millones de personas se han beneficiado con el plan de soporte de salud mental y adicciones desarrollado por la Alcaldía.
- 200,000 viviendas asequibles y restauradas desde 2014.
- 10,000 oportunidades de financiamiento y apoyo a pequeños emprendedores y negocios de las minorías.
- 500,000 personas superaron la línea de pobreza.
- $15 dólares es el salario mínimo por hora oficial para los trabajadores de la Gran Manzana.
- 500 millas de ciclovías fueron construidas en NYC como parte del plan Vision Zero.
- 10% crecieron los puntajes de graduación en las escuelas secundarias públicas.