COVID: Estudio revela que las vacunas pueden alterar los ciclos menstruales
Un estudio con casi 4 mil mujeres confirmó que las vacunas contra el covid-19 podrían afectar los periodos menstruales
Investigadores encontraron un cambio clínicamente significativo en los ciclos de las mujeres recién vacunadas. Crédito: Alina Blumberg | Pexels
Un nuevo estudio informó que algunas mujeres podrían haber sufrido una ligera alteración en sus ciclos menstruales tras recibir la vacuna contra el covid-19, aunque éste, según mencionan, no ha sido lo suficientemente concluyente, además de que dicha alteración se regula en pocas semanas, lo que no afectaría a largo plazo la salud de quienes reciban la inmunización.
Según dicho estudio, el ciclo menstrual de un porcentaje de mujeres vacunadas fueron ligeramente más largos que los de aquellas que no se habían inoculado, aunque faltan muchos datos e investigaciones para conocer más a fondo esta reacción, que según los expertos, no pondría en peligro la salud de las mujeres.
Poco después del lanzamiento de las vacunas contra el covid-19, comenzaron a surgir historias de mujeres que experimentaban cambios en sus ciclos menstruales después de recibir la inmunización.
Durante mucho tiempo, esto no atrajo demasiada atención en los medios, y muchos expertos médicos continuaron asegurando al público que las vacunas contra el coronavirus no causaban estos efectos secundarios. Tales historias permanecieron confinadas a conversaciones, foros de internet y las redes sociales.
Algunas mujeres comenzaron a mostrar que tras las dos dosis de la vacuna, sus ciclos menstruales comenzaron a ser diferentes, como sangrados abundantes y más dolor de lo habitual.
Las vacunas pueden afectar la menstruación
Ahora, un primer estudio de este tipo, dirigido por mujeres y revisado por pares, confirma las experiencias de algunas mujeres: las vacunas contra el coronavirus pueden afectar a los períodos menstruales.
Con un conjunto de datos de casi 4,000 mujeres, tanto vacunadas como no vacunadas, y con el uso de una aplicación de seguimiento del ciclo menstrual, los investigadores encontraron un cambio clínicamente significativo en los ciclos de las mujeres recién vacunadas, con una duración promedio de casi un día más.
Por lo general, los ciclos volvieron a la normalidad en uno o dos meses. Sin embargo, algunas mujeres se preguntaron por qué no se informó de este posible efecto secundario antes de recibir la vacuna.
La información menstrual no se rastrea en los estudios clínicos de las vacunas contra el coronavirus. Sin mencionar que los efectos secundarios menstruales no se rastrean en la Vaers, la base de datos con sede en Estados Unidos que permite a las vacunadas ingresar los posibles efectos secundarios ellas mismas.
Hablar de la menstruación es tabú
La menstruación es uno de los puntos de referencia básicos en la salud de las mujeres en edad reproductiva. Sin embargo, “hablar de la menstruación sigue siendo un tabú”, considera la editora senior Sonya Diehn de DW.
“Una y otra vez, se ha quitado importancia o no se han escuchado los reportes que informaban sobre alteraciones en el ciclo menstrual después de recibir las vacunas. Sobre todo los defensores bien intencionados de la vacunación, que intentan contrarrestar las afirmaciones infundadas de que las vacunas podrían dañar la fertilidad”, escribió para el portal.
Incluso, después de que se publicara el estudio sobre la menstruación, “leí titulares que restaban importancia a sus conclusiones”, agregó. Por supuesto, algunas mujeres no han experimentado cambios en sus ciclos menstruales, o ninguno que hayan notado. Pero la falta de información podría tener un fuerte efecto psicológico en las mujeres que sí experimentan cambios significativos sin saber por qué.
Las críticas a las vacunas se descartan por que se consideradas irracionales o delirios de los “teóricos de la conspiración”. Sin embargo, “debería ser posible discutir cualquier tema legítimo sin vergüenza ni castigo”, redactó Sonya.
Como resultado de que los expertos médicos no escuchen las preocupaciones válidas, es posible que algunas mujeres hayan perdido la fe en la vacunación.
“Tenemos que eliminar los tabúes a la hora de hablar sobre el período menstrual. Necesitamos hacer que la salud reproductiva femenina sea más central en la educación y la atención de la salud. La sociedad y la ciencia necesitan escuchar a las mujeres”, concluyó.
Con información de DW/ Sonya Diehn.
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