El NYPD resucita iniciativa ‘ventanas rotas’ para combatir alza del crimen en NYC
La comisionada de Policía anunció un refuerzo de lucha contra los delitos de la calidad de vida “que contribuyen al crimen y el desorden”
Han transcurrido más de dos meses y medio desde que Eric Adams asumió como Alcalde y algo que no ha cambiado con la nueva Administración es el indetenible aumento del crimen en la ciudad de Nueva York. Y en respuesta a esta alza de tiroteos y robos, así como al aumento de los delitos contra la calidad de vida “que contribuyen al crimen y el desorden”, la comisionada de Policía Keechant Sewell anunció este miércoles la puesta en marcha de una nueva iniciativa.
Y aunque no tiene un nombre específico, el nuevo plan del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) suena muy similar a la controversial política de vigilancia conocida como ‘Broken Windows’ de la era del exalcalde Giuliani, que se enfocó en combatir delitos de calidad de vida como beber alcohol y orinar en las calles, jugar dados en las aceras, saltarse el torniquete del Subway, o simplemente hacer ruido o escuchar música alta.
La máxima jefa de la Uniformada indicó en un comunicado que la iniciativa es una respuesta a las preocupaciones de seguridad pública de los neoyorquinos comunes, y consistirá en desplegar a más oficiales en los condados y precintos con más crímenes. “Trabajarán en conjunto para identificar y responder rápidamente a las tendencias delictivas y abordar las condiciones que las alimentan”.
Objetivo principal: Armas de fuego
“Como dije en mi primer día como comisionada, después de visitar a un oficial que recibió un disparo dos horas y treinta y nueve minutos después del Año Nuevo, hay demasiadas personas que portan armas ilegales y demasiadas personas dispuestas a usarlas”, dijo Sewell, agregando de manera tajante: “Eso tiene que cambiar. Ahora”.
Esta nueva iniciativa se pone en marcha a menos de dos semanas en que comenzó a funcionar la nueva unidad contra el crimen llamada ‘Equipo de Seguridad Vecinal’ (NST) lanzada por el Alcalde como parte de ‘plan maestro’ contra el crimen, y cuyo objetivo principal es combatir la violencia armada.
Sewell recordó que durante el último fin de semana, incluso hasta el lunes de esta semana, la ciudad de Nueva York vio 31 tiroteos que dejaron decenas de heridos, incluyendo a una niña de 7 años, “una víctima no deseada atrapada en el fuego cruzado de dos bandas rivales”.
No vuelve el ‘stop and frisk’
El seguimiento del NYPD a las quejas sobre delitos de calidad de vida muestra que, en las comparaciones anuales hasta la fecha desde 2019, las llamadas sobre grupos que beben en la calle se han duplicado de 1,452 a 3,193, y que las llamadas sobre fiestas ruidosas en espacios públicos aumentaron a 9,013, comparadas con 3,338 en 2019. En el mismo período, las llamadas al 911 que reportan personas con cuchillos en el sistema de tránsito han aumentado en un 139%, mientras que los informes de venta de drogas en el Subway han aumentado en un 71%.
“Estas son las cosas por las que la gente llama para quejarse”, dijo el jefe de Departamento Kenneth Corey, “y el NYPD les debe una respuesta. Y si bien la mayoría de los encuentros comienzan con una advertencia, cuando nuestros oficiales ven que alguien ignora esas advertencias, habrá aplicación de la ley”.
“Para ser claros”, enfatizó la comisionada Sewell, “este NO es un regreso a ‘Stop, Question, and Frisk’, ni es ‘vigilar por números’. Esta aplicación de la ley responderá a las quejas e inquietudes de la comunidad”.
Sin embargo, la organización de defensores ‘The Legal Aid Society’ reaccionó indicando que la nueva iniciativa era simplemente el “restablecimiento de la vigilancia de ventanas rotas de la era Giuliani”.
La abogada Jennvie Wong, del Proyecto de Responsabilidad Policial de esa organización, indicó: “Seamos claros, este plan restablece la vigilancia de ventanas rotas y, sin duda, enviará a más neoyorquinos negros y latinos a Rikers Island, una instalación que es totalmente incapaz de cuidar a las personas bajo su custodia”.
Historia de ‘ventanas rotas’
La política de vigilancia policial conocida como ‘ventanas rotas’ fue impuesta por el entonces comisionado de Policía William J. Bratton, cuando ocupó el cargo por primera vez durante la administración del alcalde republicano Rudolph Giuliani.
Bratton, quien luego volvió a repetir en el cargo durante los primeros años del mandato del exalcalde Bill de Blasio, defendió esa táctica contra los llamados crímenes de ‘calidad de vida’, y que popularmente era conocida como política de “tolerancia cero”, usando la teoría cuyo principio básico asegura que al cortar de raíz las transgresiones menores se evita una escalada del crimen en el futuro.