Niños menores de 5 años en NYC seguirán con máscaras en guarderías y escuelas hasta nuevo aviso

Los más pequeños de la ciudad de Nueva York que asisten a centros de cuidado diario y a salones de 3-K y Pre-K, deben seguir usando máscaras. Por lo menos, hasta nuevo aviso.

Aunque  se esperaba que este lunes se levantara el mandato de protecciones faciales para los más pequeños de la Gran Manzana, que no aplican todavía para vacunas contra el COVID-19, el avance de la variante BA.2 hizo a las autoridades de Salud poner una pausa en esta decisión.

“Nuestras políticas tienen en cuenta la salud y la seguridad de nuestros hijos. Los niños entre 2 y 4 años deben continuar usando sus máscaras en la escuela y la guardería. Algún giro en nuestras políticas dependerá siempre de lo que establezca la ciencia”, anunció el fin de semana el alcalde Eric Adams.

Este movimiento estuvo brevemente en duda el pasado viernes, después de que un juez de la Corte Estatal dictaminó que el mandato de máscara para los niños menores de edad era “nulo e inaplicable”. 

La Ciudad impugnó el fallo y convenció a un tribunal de apelaciones para que reestableciera el protocolo de protección facial, mientras el caso avanza en los tribunales.

“No es obligatorio, pero mejor úsenlas”

Todo indica que los casos seguirán aumentando en las próximas semanas, aún así, no está cerca en este nuevo panorama pandémico la reversión de políticas de enmascaramiento en las escuelas primarias y secundarias de la Gran Manzana. 

“Es probable que durante estas semanas pasemos a un nivel diferente de riesgo general en toda la ciudad, por eso recomendamos que por libre elección las personas usen máscaras en lugares públicos e interiores”, explicó el Dr. Ashwin Vasan, comisionado del Departamento de Salud de la Ciudad de Nueva York (DOHMH).

A pesar de esta recomendación, las autoridades han dejado muy claro en las últimas horas que no hay en este momento razones de alarma. Ni la posibilidad de que la nueva variante del coronavirus detenga los planes de recuperación económica.

En efecto, de acuerdo con los últimos datos publicados por el DOHMH, los casos de COVID-19 muestran un alza en la Gran Manzana, particularmente en Manhattan y partes de Brooklyn, que no se puede comparar en lo absoluto con los riesgos que implicó la aparición de ómicron durante las fiestas de Navidad.

La tasa de positividad de siete días de la ciudad aumentó hasta el 2.67 % el pasado 1 de abril, con un total de casos diarios promedio de 1,254. 

La interpretación es que se trata de casos muy localizados y reducidos en una ciudad de más de 8 millones de habitantes.

El aumento se puede atribuir a la propagación de la subvariante BA.2 de la variante ómicron del coronavirus, que con base a las observaciones preliminares científicas, es mucho más contagiosa, aunque aparentemente, no tan potente.

Aunque existe “optimismo”, de que la nueva variante que circula en las calles de la ciudad no se convierta en una nueva oleada, hay la posibilidad de que algunas localidades pasen de un nivel de “riesgo bajo” a un nivel de “riesgo medio”, según el nuevo sistema de alerta codificado por colores basado en las pautas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)

En este sentido, localidades de Manhattan como el Upper West Side, TriBeca y Battery Park City podrían tener un “cambio de color”.

“Debemos seguir nuestra vida”

Pero entre las marchas y las contramarchas en las políticas de protección ante un virus que todavía sigue en la ciudad, la madre dominicana María Hernández comenta que “con máscaras o sin máscaras, con vacunas o sin vacunas, siempre se ven nuevos contagios en las escuelas”. 

La madre cuenta que en varias ocasiones ha recibido correos electrónicos indicando de nuevos casos para activar las medidas de protección.

“Yo tengo dos hijos y uno está muy pequeño, pero el otro sí va a la escuela. Si se tiene que volver a poner la máscara se la pondrá. Esto es impredecible. Debemos seguir nuestra vida”, concluyó la residente de Manhattan.

Entre tanto, la panameña Lucía Cáceres, quien vive en Brooklyn, considera que para los mas pequeños como su hijo de cuatro años, la protección que significa una máscara es mínima, porque en su opinión personal, cuando ellos están “correteando y jugando en grupo, eso no sirve de nada”.

COVID-19 en NYC:

• 500 casos diarios de COVID-19 en promedio a principios de marzo versus 1,250 casos diarios hasta el pasado fin de semana.
• 70% de los nuevos casos están asociados con la nueva subvariante BA.2.
• 13 hospitalizaciones por día en comparación con 1,000 pacientes internos diariamente por complicaciones asociadas con el coronavirus a principios de 2022.