Musulmanes y cristianos en la Italia medieval abusaron de una mujer judía para extorsionarla, descubre historiadora
Un impactante crimen fue descubierto por la historiadora Tamar Herzig, quien expuso evidencia desconocida de violación en grupo organizada, de un grupo de niñas
El crimen se registró en plena época medieval. Crédito: ThomasWolter | Pixabay
Los judíos italianos ricos fueron chantajeados para que compraran la libertad de los esclavos judíos negros de África, encerrándolos en una prisión para ser violados en grupo por reclusos musulmanes y trabajadores forzados cristianos.
El impactante crimen fue descubierto por la historiadora Tamar Herzig, Vicedecana de Investigación de la Facultad de Humanidades de Entin, quien expuso evidencia previamente desconocida de violación en grupo organizada, de un grupo de niñas y mujeres judías esclavizadas del norte de África.
Los crímenes de Livorno
Se llevó a cabo en la ciudad italiana de Livorno a principios del siglo XVII y, dice, fue organizado por un alto funcionario estatal en la prisión de esclavos de Livorno llamado Bernardetto Buonromei, quien también pudo silenciar cualquier queja y hasta ahora, borrar efectivamente la memoria del sufrimiento de las víctimas.
Según los documentos estudiados por Herzig, en el verano de 1610 Buonromei ordenó la asignación de un grupo de mujeres judías esclavizadas, recién llegadas del norte de África, al alojamiento de hombres en la prisión de esclavos, contrariamente a la separación habitual de mujeres y hombres en diferentes secciones.
Esta orden resultó en la violación múltiple de los judíos esclavizados por esclavos musulmanes y trabajadores forzados cristianos.
El crimen de una mujer judía
Un informe señala que una de las víctimas “perdió la cabeza” e intentó arrojar a sus hijas pequeñas por la ventana de la prisión y suicidarse.
Representantes de la influyente comunidad judía de Livorno enviaron protestas denunciando el abuso sexual sin precedentes de sus correligionarios esclavizados a las autoridades toscanas, pero todas las quejas y testimonios pronto fueron silenciados con la ayuda del Gran Duque de Toscana, quien respaldó al Dr. Buonromei.
El gran duque aceptó las afirmaciones del médico de que sus acciones habían tenido como objetivo aumentar las ganancias del estado toscano del comercio de esclavos, asegurando el pago futuro de altas tarifas de rescate por los judíos extranjeros esclavizados por parte de la comunidad judía local en Livorno.
Buonromei mantuvo su trabajo como médico a cargo de la prisión de esclavos, y cuando murió unos años más tarde fue tal la gratitud del Gran Duque que pagó su lápida en la iglesia principal de Livorno.
La comunidad judía de Livorno en el siglo XVII era una de las comunidades judías italianas más ricas e influyentes, y su relación con los gobernantes del estado toscano solía ser fuerte, pero de acuerdo con los documentos que descubrió el profesor Herzig, los miembros ricos y bien conectados de la comunidad judía de Livorno, sin embargo, estaban sujetos a la extorsión por parte de funcionarios gubernamentales como Buonromei.
El profesor Herzig descubrió que los gobernantes del Gran Ducado de Toscana emplearon el incidente de la violación en grupo como un gran espectáculo de violencia, usándolo para ejercer presión sobre la comunidad judía para que accediera a pagar tarifas de rescate exorbitantes por los judíos capturados en el norte de África y transportado a la fuerza a Livorno.
Buonromei, que fue el primer alcalde de Livorno antes de su nombramiento en la prisión de esclavos, todavía es honrado hoy como uno de los padres fundadores de la ciudad. Una calle de Livorno lleva su nombre, y una figura que lo conmemora desfila en las procesiones anuales que celebran la elevación de Livorno a la categoría de ciudad.
El estudio de Herzig fue publicado en la prestigiosa revista American Historical Review. La profesora Herzig espera que la exposición de sus hallazgos en los medios italianos conduzca a un cambio en la conmemoración de Buonromei, un hombre que hizo su fortuna con la trata de esclavos y fue personalmente responsable del horrendo abuso de mujeres y niñas judías esclavizadas.
La mayoría de los estudios sobre la esclavitud en la Italia del siglo XVII se han centrado anteriormente principalmente en los esclavos de las galeras, que supuestamente sufrían un trato más duro que las mujeres esclavizadas.
También lee:
· Arqueólogos encuentran sandalia romana de 1,700 años de antigüedad en hielo derretido en Noruega
· Los primeros reyes medievales de Inglaterra eran mayoritariamente vegetarianos, según un estudio
· Descubren el informe más antiguo conocido de un extraño fenómeno meteorológico en un texto medieval
