Francia no falla ante una gran Marruecos y defenderá título en la final ante Argentina
Al igual que contra Inglaterra en cuartos de final, Francia no fue superior al rival en el juego, pero sí más eficaz en las áreas
Theo Hernández supera a Yassine Bounou para marcar el 1-0. Crédito: Dan Mullan | Getty Images
AL KHOR, Qatar – MARRUECOS, el equipo más duro de este mundial, de pronto fue Marruecos, a secas, un país de segunda fila en el fútbol, por unos minutos.
Un equipo al que el rival no le había marcado en cinco partidos -sólo había cedido un autogol ante Canadá-, tardó cinco minutos en ver su portería perforada por Francia.
Los franceses salieron a presionar muy arriba en el inicio, buscando aprovecharse de los nervios iniciales de un equipo que nunca se había visto en esta instancia de una Copa del Mundo. La táctica resultó.
En una jugada por la derecha generada por un desmarque de Antoine Griezmann, Kylian Mbappé remató contra las piernas de la defensa marroquí para que el rebote cayera botando al segundo palo donde estaba solo Theo Hernández. El lateral del AC Milan no falló con la izquierda en un acrobático remate.
Con el objetivo logrado, Francia se echó atrás, a esperar a un Marruecos que por primera vez en el campeonato se vio por detrás en el marcador.
Obligados a atacar, a los del Magreb se les olvidaron las dudas iniciales y comenzaron a acercarse con peligro al área de Hugo Lloris, arquero francés que jugó su partido número 19 de fase final de mundiales, igualando el récord del alemán Manuel Neuer para la posición de arquero.
Un tiro lejano de Azzedine Ounahi obligó a lucirse a Lloris en el palo izquierdo. Una chilena de Jawad El Yamiq, en el derecho. Marruecos llegaba, pero no definía.
Mientras, Francia contraatacaba con peligro, con Griezmann entre líneas lanzando a Mbappé y a Olivier Giroud.
En los inicios de la segunda parte, Marruecos fue un ciclón que encerró a Francia cerca de su área, con algunas de las triangulaciones más vistosas del campeonato, y con un gran Hakim Ziyech que entraba por la banda derecha una y otra vez. Pero les siguió fallando el último pase, el remate que empatara el marcador.
Poco a poco Marruecos fue bajando la intensidad y Francia subiendo las líneas. Mbappé, con más espacios, superaba a su compañero del PSG Achraf Hakimi y a Achraf Dari. Hasta que en una jugada de los franceses bien elaborada, el 10 destinado a llevar la corona de mejor jugador del mundo en cuanto la entregue Leo Messi, se internó en el área dejando a todos atrás y, otra vez con un rebote favorable, dejó el balón para que el recién entrado al campo Kolo Muani empujara a la red.
Marruecos se vuelve a casa con la cabeza muy alta, completando un extraordinario campeonato y con un 61% de posesión de balón ante Francia. También lanzó más corners, tres, por dos de los franceses.
Esta Francia gana cuando juega bien y gana cuando juega regular. Ya lo hizo hace cuatro años en Rusia y está a un paso de hacerlo aquí en Qatar.
Sólo lo puede evitar el deseo de Messi de aferrarse a esa corona por unos días más.
Francia y Argentina jugarán la final del Mundial Qatar 2022 el domingo 18 de diciembre en el estadio Lusail.
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