Acusan a hispano ligado a la MS-13 de matar y desmembrar a empleado de entregas en medio de “delivery” en su casa en Florida; sacó los restos en bolsas de basura
Randall Cooke, de 59 años, realizaba la última entrega del día cuando alegadamente fue atacado por Oscar Solís Jr., de 30, por razones que al momento se desconocen
Oscar Solís supuestamente tiene vínculos con la pandilla MS-13 en Indiana. Crédito: Oficina del Alguacil del condado Pasco | Cortesía
Un hispano en Florida con supuestos vínculos con la pandilla MS-13 fue acusado de asesinar y desmembrar a un empleado de entregas de Uber Eats, luego de que la víctima arribara a su vivienda a llevarle una orden.
Randall Cooke, de 59 años, fue asesinado en su última entrega la noche del miércoles pasado en una residencia de Holiday.
El alguacil del condado Pasco, Chris Nocco, indicó en una conferencia de prensa este martes que Oscar Solís Jr., de 30, la emprendió contra el “deliverista” dentro de su casa por razones que aún se desconocen.
Sin embargo, los restos de Cooke y su sortija de matrimonio fueron recuperadas en la vivienda de Solís en bolsas de basura en una nevera. Agentes además descubrieron un recibo con el nombre de Solís, detalla la denuncia criminal.
Además, oficiales identificaron manchas de sangre en varias partes del inmueble y un llavero propiedad de Cooke en el tocador de Solís sobre su billetera. Adicional, el auto de Cooke fue hallado abandonado a corta distancia de la casa; en su interior había -entre otras evidencias- una bolsa de basura con trapos y toallas empapadas de sangre, y una tarjeta de asistencia al trabajo con el nombre del criminal.
El hispano había salido de una prisión en Indiana en enero pasado luego de cumplir cuatro años por una agresión y un robo.
Hacía tres meses que Solís se mudó a Florida, según Nocco.
En la foto de fichaje, el rostro de Solís luce cubierto de tatuajes. Supuestamente, el convicto estaba afiliado a la pandilla MS-13 (Mara Salvatrucha) en Indiana.
En Florida, el hombre de 6’4″ y 315 libras trabajaba como vigilante en un “strip club”.
El “roommate” del presunto asesino le suministró a las autoridades material de cámaras de vigilancia que muestran cuando Cooke se aproxima a la residencia a entregar la orden de comida. En las imágenes se ve a dos hombres hispanos cargando bolsas pesadas al exterior luego de que Cooke realizó el “delivery”.
Sigue leyendo:
