Poblanos de Yonkers arman por vez primera un Festival Cinco de Mayo
Mexicanos residentes en esta ciudad del condado Westchester se preparan este viernes para la conmemoración de la Batalla de Puebla
Pese a que la Cámara de Comercio Mexicana de Yonkers (CCMY) es una organización que cuenta con 26 años de trayectoria, y en la cual casi el 95 por ciento de quienes la forman son oriundos del sur de Puebla, México, el 2023 es el primer año en que organizan en festival para celebrar el Cinco de Mayo.
En esta fecha se conmemora la batalla celebrada en 1862 entre un bastión del ejército mexicano al mando del general Ignacio Zaragoza, quien venció e hizo retroceder al entonces poderoso ejército francés. En Estados Unidos se suele reconocer al Cinco de Mayo como una efeméride de relevancia para los mexicanos, incluso más que la celebración por la Independencia del 15 de septiembre.
En la tarde de este viernes, a Yonkers llegará como grupo estelar la banda sinaloense La Prendida, conformada por 18 elementos y además contarán con la participación de La Reina del Mariachi, el Ballet Folclórico Espíritu de México y el dueto norteño Carlos y José. A partir de las 3 de la tarde, en el Getty Square que forman los cruces de Nepperhan Avenue y Main Street, en la ciudad de Yonkers, habrá además puestos de comida y diversas amenidades como una feria con juegos infantiles. El alcalde de esa ciudad, Mike Spano, será el encargado de inaugurar el evento.
Una ciudad cada vez más mexicana
Ubicada a la orilla del Río Hudson a tan sólo 30 minutos en tren de la Ciudad de Nueva York, Yonkers es una de las ciudades más pujantes del condado de Westchester. El más reciente Censo lanzado a mediados del 2022 arrojó la cantidad de 209 mil habitantes de los cuales el 40 por ciento son hispanos, sector que apenas se halla debajo de los blancos que representan el 46 por ciento.
Pero es en el comercio donde los mexicanos se han posicionado en esta zona llena de áreas verdes. Sobre todo, hay una notoria variedad de restaurantes destacando el La Hacienda Mexicana, el Dos Marías, Los Primos, El Calvario, El Ranchero, Fonda 5 de Mayo y Guapo, entre otros. También están el taller mecánico Mexicana, el café El Poblano y las bodegas de productos enviados desde México como La Conasupo y la Comercial Mexicana.
“Ya somos más de 200 negocios afiliados” dice a El Diario Roberto Espíritu, actual presidente de la CCMY. Sentados alrededor de una mesa junto a Alfonso Álvarez quien presidió durante 14 años la cámara, cuentan como en 1990 fue el banderazo de salida de un éxodo constante de mexicanos a esa área al norte de la ciudad de Nueva York. “Los negocios comenzaron a surgir poco a poco y ya para cuando formamos la Cámara en 1997 éramos casi 70”, recuerda Álvarez quien es dueño de varios negocios ligados a la gastronomía.
En la zona vive un variopinto catálogo de ciudadanos llegados de varios estados de la República Mexicana, pero es en el rubro de quienes han decidido emprender con un negocio donde los de Puebla son predominantes, repetimos, con un 95 por del total de microempresarios nacidos en ese estado.
¿Por qué Yonkers se lleno de mexicanos, pero sobre todo de comerciantes poblanos?
“Es la falta de oportunidades en la región Mixteca del sur del estado de Puebla que debe ser uno de los mayores expulsores de migrantes”, interviene Erasmo Ponce quien también se halla presente en la charla. “Es una zona muy árida donde la gente depende de la cosecha: si hay lluvia hay cosecha y si no pues no”, puntualiza. Don Erasmo es el dueño de las tortillerías Chinantla Incorporation que, desde sus dos plantas en Brooklyn Nueva York y Newark, New Jersey, distribuye sus productos a estados como Florida, Georgia y Carolina del Norte, Pensilvania, Delaware y Maryland, así como a otros de Canadá como Toronto Quebec y Otawa.
Ponce cuenta que su madre viajó como inmigrante desde los años sesenta a Nueva York y cómo ella le enviaba dinero a su hijo para que terminara sus estudios. Finalmente, él se trasladó a vivir a finales de los 80 a los Estados Unidos y ahora vende un estimado de 30 toneladas de tortillas diarias.
¿Para qué sirve una cámara de comercio?
“Siempre digo que la función de la cámara es cubrir la necesidad de representar a nuestra propia gente, hacer cosas que fortalezcan los negocios, y además movernos como una organización política y social”, continúa Roberto.
“Antes de formarnos siempre tocábamos el tema de que deberíamos de estar unidos y así lo hicimos”, dice por su parte Alfonso Álvarez quien llegó a viajar a varios eventos en su calidad de presidente.
“Usamos nuestro dinero, por ejemplo, para dar becas a estudiantes cuyos padres son de bajos recursos. Llegamos a juntar 30 o 40 mil dólares y lo repartimos entre aquellas familias que tiene problemas económicos” secunda señor Ponce a quien también se le conoce como “El Rey de la Tortilla”.
“Tratamos de hacer actividades para el pueblo para regresarles algo de lo que nos ha dado pues son nuestros clientes: es una forma de motivarlos”, aclara Espíritu, dueño de la panadería y pastelería La Piñata. “Lo hacemos para que sigan siendo nuestros clientes y hablen cosas buenas de nosotros”.
Ser una cámara también implica tener una buena relación con el alcalde, con la policía local y en general con todas las autoridades. Este trio relata como en la pandemia se juntaron entre algunos para armar paquetes de comida para regalar a quienes habrían sufrido la perdida de su empleo y se encontraban en una situación apremiante.
“Era lo menos que podíamos hacer”, apunta Ponce.
Aceptan que el festival del Cinco de Mayo los tiene muy emocionados. Ya hicieron intentos por organizar esta clase de fiestas haciendo tres años seguidos festejos callejeros con motivo del 15 de septiembre. “Han sido unas fiestas enormes, con mucha gente, puestos callejeros y música: se ha puesto intenso”.
Para la tarde de este viernes esperan la llegada de al menos 5,000 personas de la comunidad mexicana y latinoamericana de Yonkers, aunque la invitación la han extendido a cualquiera que desee disfrutar de una jornada con música en vivo, comida y bebidas.
“Va a estar loco” vaticina finalmente Roberto Espíritu sobre el primer intento de la organización que preside por armar un Festival del Cinco de Mayo.