Familia de hispana acribillada a balazos por policías en su apartamento en Texas cuando sufría crisis mental planea demandar a las autoridades
El video de la cámara corporal de uno de los oficiales captó el momento en que estos empiezan a disparar desde el exterior de la vivienda; al momento de ser impactada por los disparos, Pérez cargaba un martillo
La familia de Melissa Pérez, la hispana que fue baleada fatalmente por policías en su apartamento en San Antonio, Texas, mientras pasaba por una crisis mental planea demandar a las autoridades.
“No estamos hablando de un oficial corrupto que simplemente perdió la cabeza o se enojó”, indicó el abogado Dan Packard a KENS 5.
“Estamos hablando de tres oficiales que pensaron que estaba bien dispararle a esta mujer en su propia casa”, planteó el representante legal.
Los hechos que llevaron a la muerte de Pérez, de 46 años, se reportaron la madrugada del pasado viernes en el suroeste de la ciudad. El propio jefe de la policía, William McManus, indicó que la mujer enfrentaba una crisis mental al momento de la intervención.
El video de la cámara corporal de uno de los oficiales captó el momento en que estos empiezan a disparar desde el exterior de la vivienda. Al momento de ser impactada por los disparos, Pérez cargaba un martillo. Sin embargo, la mujer se encontraba en el interior del apartamento y los oficiales fuera. La hispana se habría negado a salir del apartamento bajo el argumento de que los oficiales no tenían orden de aprehensión.
En un punto, un agente le grita que, si no sale, le van a disparar; a esto, Pérez contesta que lo hagan. Posteriormente, se escucha el ruido de vidrios rotos aparentemente por el impacto del martillo, seguido de dos disparos. Pérez recibió al menos dos impactos de bala. Luego de disparar, los policías forzaron la entrada al apartamento y asistieron a Pérez hasta que llegó personal de emergencias. Sin embargo, la mujer fue declarada muerta en el lugar.
La versión de la Policía apunta a que los uniformados intentaron conversar con Pérez durante media hora antes de emprenderla a tiros. El trío llegó al complejo de apartamentos a raíz de un reporte de que la sospechosa cortó los cables de alarma del edificio.
Los policías involucrados fueron acusados de homicidio. Estos fueron identificados como el sargento Alfred Flores; y los agentes Eleazar Alejandro y Nathaniel Villalobos. Los tres fueron suspendidos sin sueldo, pero salieron libres bajo fianza tras pagar $100,000 dólares cada uno.
No está clara la situación de salud mental que sufría Pérez y tampoco qué detonó la crisis.
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