Hombre mató a tiros a madre de su hija pensando que lo contagió con ETS, pero la víctima no estaba enferma

La mujer a la que el padre de su hija mató a tiros en una tienda Home Depot en Pensacola, Florida, porque supuestamente lo había contagiado con gonorrea, en realidad no estaba enferma.

Así lo evidenció la Fiscalía en una audiencia este miércoles luego de que un jurado declaró a Keith Agee culpable de asesinato premeditado en primer grado.

Brooklyn Sims, de 18 años, dio negativo a un examen para detectar la enfermedad de transmisión sexual (ETS) días antes del asesinato.   

El Estado proveyó documentos que incluían mensajes de texto entre Agee y Sims, así como fotos de la cita médica del 5 de agosto. El material prueba que la joven no estaba contagiada con la ETS.

“Sé que en el gran esquema de las cosas esto no importa, pero nosotros queremos darle a la Srta. Smith un poquito de dignidad”, planteó en corte la fiscal adjunta estatal Bridgette Jensen.

Agee, de 20, admtió que mató, el 11 de agosto pasado, a la madre de su niña de 2 años en el interior del Home Depot de Pensacola en el que esta laboraba.

Furioso tras contagiarse con ETS

Agee confesó que estaba furioso tras contagiarse con la ETS luego de un encuentro íntimo con la víctima a la que acusó de infiel.  

“Yo dije, ‘tú me pegaste algo’. Ella dijo, ‘esto de nuevo no’, se volteó y empezó a alejarse de mí caminando. Yo nunca había estado tan molesto en mi vida”, declaró el asesino según citado por la televisora WKRG / News 5. “Yo saqué mi arma de mi cintura y procedí a dispararle a Brooklyn”, añadió.

Agee fue sentenciado a cadena perpetua por el cargo de asesinato premeditado. A pesar de que enfrentaba un cargo de agresión agravada, el jurando lo declaró no culpable.

Madre de Keith fue acusada como cómplice

La madre de Agee, Sheila, enfrenta un cargo en primer grado de asesinato premeditado por instar a su hijo a cometer los hechos.  

Su caso se verá en corte en febrero próximo.

Madre e hijo intercambiaron textos que evidencian que ambos planearon el ataque. Cuando Keith le manifestó a Sheila, de 50 años, que quería balear a Sims, esta lo motivó a que lo hiciera.

Según las autoridades, la mujer incluso le suministró información sobre la ubicación de la víctima y le aconsejó borrar los textos incriminatorios.

En un mensaje en sala previo al veredicto, la madre de Sims Tiyanna Thomas, dijo que no odiaba al atacante.

“Pero yo no lo puedo perdonar todavía. Yo estoy criando a su hija. Ese día, Casey perdió a su mama, su papá y su abuela”, lamentó.