DHS registra nuevo aumento en cifras de explotación sexual de menores en Puerto Rico
La Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), adscrita al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), reveló que en el primer trimestre de este año fiscal federal se rescataron 11 víctimas, lo que representa un aumento de 35%
El abuso sexual tiene muchas modalidades. Crédito: Pixabay
Nueva York – La Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) ha registrado un incremento en Puerto Rico de casos de explotación sexual de menores.
La entidad, adscrita al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), reveló que en el primer trimestre de este año fiscal federal (entre octubre y diciembre de 2023) se rescataron 11 víctimas.
“Ya se han rescatado 11 víctimas. Eso es un aumento de 35%”, dijo a El Nuevo Día el agente especial Alek Pacheco, director del Grupo de Trabajo de Crímenes contra Menores de HSI en la isla.
El oficial aclaró, sin embargo, que el rescate e identificación de las víctimas no necesariamente se traduce en la radicación inmediata de acusaciones.
“Quizás los casos de esas víctimas se pueden ver al final del año (fiscal federal). Después de que se identifican esas víctimas comienza un proceso, y la investigación puede tomar meses”, añadió el portavoz.
El HSI reveló además que en ese mismo trimestre registró un aumento de investigaciones con un total de 12 casos iniciados. El año previo, fueron nueve en el mismo periodo.
En cuanto a arrestos, la oficina informó de tres, uno más que el primer trimestre del año fiscal federal 2022-2023.
El reporte de El Nuevo Día se da en el contexto de varios arrestos reportados en las pasadas semanas por crímenes de este tipo.
Dos arrestos por explotación sexual en un mismo día en Puerto rico
Precisamente, el lunes pasado, HSI informó sobre el procesamiento criminal de dos hombres en Puerto Rico por explotación de menores.
El 26 de enero, agentes del Grupo de Trabajo de Crímenes contra Menores arrestaron a Elvin Jhohanie Molina-Rosado,de 35 años y residente en Corozal.
Las autoridades federales alegan que, entre febrero de 2020 y abril de 2022, Molina-Rosado utilizó su computadora y aplicaciones de redes sociales para convencer y seducir a una jovencita, entre los 12 y 14 años, para que incurriera en conducta sexual explícita.
Durante la misma extensión de tiempo, el sospechoso habría producido, recibido y transmitido material de explotación sexual de menores, según el comunicado de prensa del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
El segundo arresto se realizó el mismo día, pero en Caguas.
Agentes del HSI en Fajardo intervinieron con Edwin Martínez-Ortiz, de 45 años.
De acuerdo con la denuncia criminal, entre marzo de 2016 y el 1 de mayo de 2022, el acusado, a sabiendas, usó un celular para inducir a una menor entre los 10 y 16 años a incurrir en conducta sexual explícita, y a producir y transmitir la descripción de dicha conducta.
Durante el mismo periodo, Martínez-Ortiz poseyó y accedió con intento de ver, imágenes de explotación de menores, incluyendo uno que no había cumplido los 12 años.
Las distintas modalidades de explotación sexual
La definición de explotación sexual de menore incluye abuso sexual, violencia sexual y explotación sexual con fines comerciales. El abuso sexual es infligido por alguien que está en una posición de poder sobre la víctima.
“La explotación sexual ocurre cuando un grupo de personas o una persona involucra a niñas, niños o adolescentes en actos sexuales para satisfacción propia o de otras personas a cambio de cualquier tipo de beneficio, dinero, especias, protección, regalos”, explica Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en su sitio web.
Hay varias modalidades de explotación sexual, como por ejemplo, actos sexuales remunerados o con promesa de remuneración que implican la utilización de niñas, niños o adolescentes en actividades sexuales a cambio de una remuneración, promesa de remuneración o cualquier otra forma de retribución.
Otro tipo de explotación sexual es la utilización de imágenes de niños en pornografía o cualquier representación de un niño, niña o adolescente en actividades sexuales explícitas, reales o simuladas, o toda representación de sus partes genitales con fines primordialmente sexuales.
Una tercera manera de incurrir en el delito de explotación sexual es a través de viajes y turismo.
“Esta forma se da generalmente a partir de explotadores que viajan de su país de origen a otro de menor desarrollo y/o donde se lleva a cabo la explotación sexual de personas menores de edad”, detalla la entidad.
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