Mike Johnson anuncia junto a Trump proyecto que ya existe para prohibir el voto a los no ciudadanos
El proyecto de ley requeriría una prueba de ciudadanía para votar
Miami – Acompañado por el exmandatario Donald Trump en su club Mar-a-Lago de Florida, el presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., Mike Johnson, anunció este viernes que estudia un proyecto de ley, que según dijo, pretender proteger las elecciones de noviembre próximo del voto de personas que no sean ciudadanas de EE.UU.
Johnson, quien enfrenta amenazas del ala radical del partido republicano para sacarlo del puesto, detalló en una rueda de prensa que el proyecto de ley requeriría una prueba de ciudadanía para votar.
El presidente de la Cámara Baja admitió que la iniciativa parece ser de “sentido común”, pero argumentó que lo ha presentado como respuesta a la crisis migratoria de la frontera.
Durante la rueda de prensa conjunta, Johnson y Trump arremetieron de nuevo contra el Partido Demócrata y el Gobierno del presidente Joe Biden, al que acusaron de mantener una política de fronteras abiertas.
“Por qué harían esto, por qué permitirían este caos, la violencia, porque quieren convertir a estas personas en votantes”, subrayó Johnson.
El anuncio sorprendió a los grupos proinmigrantes, debido a que ya existe una medida que previene ese ilícito.
La Ley de Reforma de Inmigración Ilegal y Responsabilidad de los Inmigrantes, aprobada en el Gobierno del demócrata Bill Clinton (1993-2001), prohíbe desde 1996 explícitamente votar en una elección federal a personas nacidas en el extranjero sin ciudadanía estadounidense bajo la amenaza de multas, prisión, inadmisibilidad y deportación.
Además ningún estado ha aprobado leyes que permitan votar en elecciones federales a extranjeros sin ciudadanía. Aunque algunas jurisdicciones han dado la oportunidad a sus residentes, sin importar su estatus migratorio, votar en elecciones de juntas escolares como San Francisco (California).
Por su parte, Trump continuó con su retórica antiinmigrante y pidió nuevamente el cierre de la frontera de EE.UU. con México. “Tenemos millones de personas viniendo a nuestro país, millones y millones derramándose (…) y creo que podríamos tener 15 millones ya (dentro) y algunos son terroristas”.
El expresidente, que está acusado de cuatro caso penales, entre ellos por intentar revertir los resultados electorales en los que ganó Biden y por su papel en el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, dijo que entre los millones de inmigrantes que entran de forma irregular en EE.UU., los hay que “vienen de cárceles, de instituciones mentales y manicomios. Vienen de todas partes del mundo, no solo de Sudamérica”.
Se refirió, en ese contexto, al anuncio de Venezuela de que la tasa de criminalidad ha disminuido un 67 %.
“Eso es porque han cogido a los miembros de las bandas, a los líderes, y los han depositado muy amablemente en Estados Unidos”.
“La veracidad y la transparencia son fundamentales para garantizar la confianza del público en nuestras elecciones y deberían ser un objetivo bipartidista que todos compartamos”, indicó la campaña del exmandatario, que enfrenta un proceso judicial en Georgia por interferencias en el proceso electoral de 2020.
Antes de su encuentro con Trump, Johnson anticipó a los periodistas que buscaba en el Congreso “estar absolutamente seguros de que cualquiera que vote sea en realidad un ciudadano estadounidense“.
“Necesitamos asegurarnos de que la ley federal sea clara en ese asunto y asegurarnos de que realmente tengamos integridad electoral porque es la mayor preocupación del pueblo estadounidense en este momento”, agregó.
Sin embargo, según el Bipartisian Policy Center las autoridades han investigado casos de voto emitido ilegalmente por no ciudadanos, y “no hay evidencia de que estos votos (o cualquier otro caso de fraude electoral) hayan sido lo suficientemente significativos como para afectar el resultado de cualquier elección”.