Piña: ¿una fruta clave en la lucha contra la obesidad?
La composición de la piña la convierte en una fruta recomendada para la perdida de peso y la lucha contra la obesidad, de acuerdo a investigaciones científicas la bromelina juega un papel fundamental en la transformación de la grasa
La piña es una fruta tropical rica en nutrientes, como bromelina con propiedades antiinflamatorias y compuestos fenólicos aportan múltiples beneficios a la salud y a la pérdida de peso. Además, es fuente de calcio, potasio, así como vitamina C y vitamina A.
La combinación de todos estos nutrientes de dan propiedades “antioxidante y una función antiinflamatoria, además de inhibir las enzimas hidrolíticas y oxidativas en las células humanas”, revela un estudio publicado por el Centro Nacional para la Información Biotecnológica (NCBI).
Una de las razones por las cuales se considera que la piña se ha convertido en una fruta favorable en el tratamiento de la obesidad y control del colesterol y triglicéridos en sangre, se debe a que “contiene una gran cantidad de bromelina, que desempeña un papel en la lipólisis y en la disminución de la gravedad de los síndromes cardiovasculares”.
La bromelina, es una enzima digestiva de proteínas que ayuda a metabolizar mejor los alimentos y a limpiar el tubo digestivo de parásitos.
Según este estudio, el consumo de piña, en especial su jugo, tiene efectos positivos en la disminución de la obesidad de acuerdo a experimento hecho con animales. También hace referencia a investigaciones clínicas que demuestran los efectos beneficiosos de la bromelina en el tratamiento de la obesidad.
La obesidad afecta a más de mil millones de personas en todo el mundo, de los cuales al menos de 300 millones de ellos son diagnosticados como corpulentos. Sumado a que la obesidad contribuye a enfermedades graves como diabetes tipo 2, osteoartritis y enfermedades cardiovasculares.
Importancia del jugo de piña en la pérdida de peso
La investigación consistió en dividir un grupo de ratas en dos, a unas le dieron una dieta normal y a las otras dietas alta en grasas, acompañado de jugo de piña. Los animales sometidos a la dieta elevada en grasas tuvieron “elevaciones significativas en el peso corporal, el índice de masa corporal (IMC), la acumulación de grasa corporal, la deposición de grasa en el hígado y los lípidos en sangre”, pero al tomar jugo de piña “restableció estos parámetros cerca de sus valores normales”.
Según este estudio, “disminuyó significativamente la insulina sérica y la leptina”, por lo que considera que “el jugo de piña podría usarse como candidato contra la obesidad, ya que disminuye la lipogénesis y aumenta la lipólisis”.
El consumo regular de jugo de piña ayuda a bajar la obesidad producida por una dieta alta en grasas, manifestándose en una disminución de grasa corporal y mejora el metabolismo.
El estudio indica que “el jugo de piña podría ser un candidato real contra la obesidad sin efectos dañinos obvios”.
Sigue leyendo: