Le pidió el divorcio a su esposo porque ChatGPT “le reveló” una infidelidad: “Me llamó su abogado”
Una mujer en Grecia le pidió a ChatPGT que le hiciera una lectura de café como ritual, lo que reveló una supuesta infidelidad de su esposo

Presuntamente, la IA le reveló que su esposo fantaseaba con una mujer cuyo nombre empezaba con “E”. Crédito: Alex Photo Stock | Shutterstock
¿Quién iba a imaginar que una taza de café y una IA podrían acabar con 12 años de matrimonio? Aunque parezca una historia sacada de una comedia absurda, esto ocurrió en Grecia, y tiene como protagonista a una mujer que decidió pedirle el divorcio a su esposo tras una curiosa revelación de ChatGPT.
Todo comenzó cuando la mujer, aficionada a las tendencias esotéricas, decidió probar algo diferente: preparó café griego, y como parte de un ritual moderno, le pidió a ChatGPT que analizara los restos de la taza aplicando conocimientos de taseografía (la técnica de leer patrones en el café o el té).
La idea parecía divertida… hasta que la IA reveló que su esposo fantaseaba con una mujer cuyo nombre empezaba con “E” y que estaba destinado a vivir un romance con ella.
De lectura de café a abogado de divorcios
Lo que empezó como un juego terminó en una tormenta con consecuencias legales. La mujer se convenció de que la IA le decía la verdad: no solo había fantasías, sino una infidelidad en curso. Enfurecida, pidió el divorcio, echó a su marido de la casa y les explicó a sus hijos que la relación había terminado.
El desconcertado marido compartió su versión en el programa griego ‘To Proino’, donde contó: “Me lo tomé a broma, como si fuera una tontería. Pero ella se lo tomó en serio. Me pidió que me fuera, les dijo a nuestros hijos que nos íbamos a divorciar, y entonces recibí una llamada de un abogado”.
Aunque trató de frenar el proceso, unos días después recibió los papeles formales. Sin embargo, el abogado del hombre aclaró que un análisis de chatbot no tiene ningún valor legal, y que es “inocente hasta que se demuestre lo contrario”.
La historia provocó debates en redes y también la reacción de expertos en taseografía, quienes advirtieron que no se puede hacer una lectura precisa solo con fotos. Aun así, el fenómeno se viralizó. En TikTok ya circulan cientos de videos donde los usuarios le piden a ChatGPT que interprete sus tazas de café como si fuera un oráculo moderno.
Y no es la primera vez que la inteligencia artificial se mete en asuntos del corazón. En septiembre de 2024, miles de personas usaron ChatGPT como detector de ‘red flags’ en WhatsApp. Solo bastaba enviarle capturas de pantalla para que “identificara” celos, manipulación o actitudes controladoras.
