window._taboola = window._taboola || []; var taboola_id = 'mycodeimpremedia-network'; _taboola.push({article:'auto'}); !function (e, f, u, i) { if (!document.getElementById(i)){ e.async = 1; e.src = u; e.id = i; f.parentNode.insertBefore(e, f); } }(document.createElement('script'), document.getElementsByTagName('script')[0], '//cdn.taboola.com/libtrc/'+ taboola_id +'/loader.js', 'tb_loader_script'); if(window.performance && typeof window.performance.mark == 'function') {window.performance.mark('tbl_ic');}

Por qué sería buena idea jubilarte a los 62 años y no a los 67

Jubilarse a los 62 años puede ser buena idea si tienes ahorros y buena salud: te permite disfrutar tu dinero cuando más puedes aprovecharlo

jubilado-62-anos-seguro-social-2025

Jubilarse a los 62 años puede ser una excelente decisión para quienes cuentan con respaldo económico suficiente y desean aprovechar su tiempo y salud.  Crédito: Perfect Wave | Shutterstock

Muchos trabajadores sueñan con el día de su jubilación, pero decidir cuándo comenzar a cobrar el Seguro Social es una de las decisiones financieras más importantes de la vida. Aunque jubilarse a los 62 años implica recibir un pago mensual menor, en algunos casos puede ser una decisión más ventajosa que esperar hasta los 67.

Una reducción, pero con beneficios personales

La edad mínima para solicitar los beneficios del Seguro Social es 62 años, y la edad plena de jubilación es 67 para quienes nacieron en 1960 o después.

Reclamar los pagos antes de tiempo reduce el monto mensual de forma permanente -aproximadamente un 30% menos-, mientras que postergar la solicitud hasta los 70 años aumenta el beneficio en un 8% por cada año adicional.

Sin embargo, jubilarse antes no siempre es una mala idea. Todo depende de la situación económica y del estado de salud del beneficiario.

Si una persona tiene suficientes ahorros en su cuenta de retiro, como un IRA o 401(k), y no depende completamente del Seguro Social para cubrir sus gastos, acceder a los beneficios a los 62 años puede ser una manera de disfrutar ese dinero cuando todavía se tiene buena salud y energía.

Disfrutar el dinero cuando más lo necesitas

A medida que las personas envejecen, la movilidad y la salud suelen deteriorarse. Por eso, algunos prefieren disfrutar su jubilación mientras tienen la capacidad física de hacerlo.

Un ejemplo claro: alguien que siempre soñó con viajar o practicar senderismo podría aprovechar los fondos del Seguro Social a los 62 años para cumplir esos deseos antes de que la edad limite sus posibilidades.

Además, si los beneficios no son la fuente principal de ingresos y solo representan un ingreso adicional, anticiparlos puede dar libertad financiera y emocional.

En otras palabras, no se trata solo de cuánto se cobra, sino de cuándo se puede disfrutar lo que tanto costó ganar.

No todos los casos son iguales

Por supuesto, jubilarse temprano no es la mejor opción para todos. Si los ahorros personales son limitados o el beneficiario planea depender principalmente del Seguro Social, esperar hasta los 67 o incluso los 70 años puede asegurar un ingreso más estable a largo plazo.

Lo ideal es analizar cuidadosamente el impacto financiero de cada escenario.

No es necesario elegir entre extremos: también se puede solicitar el beneficio a los 63, 64 o 65 años, ajustando el equilibrio entre ingresos y calidad de vida.

En resumen, jubilarse a los 62 años puede ser una excelente decisión para quienes cuentan con respaldo económico suficiente y desean aprovechar su tiempo y salud al máximo.

Cada caso es distinto, pero si los números y las circunstancias personales lo permiten, disfrutar antes de la jubilación podría ser la mejor inversión de todas: invertir en uno mismo.

Sigue leyendo:
IRS anuncia reembolsos sorpresa de hasta $3,743 por cambios fiscales
Pagos máximos que pueden tener los jubilados a los 62, 67 y 70 años en 2026
3 razones por las que conviene salirse de Medicare Advantage

En esta nota

Seguro social
Contenido Patrocinado