Las sensuales farmacias que cuidan la salud… sexual
Las parafarmacias eróticas surgieron en España y son algo más que una sex shop
Atrás quedaron los días en que visitar un local de artículos eróticos significaba perderse en intrincadas galerías e internarse en tugurios de vidrieras tapadas con papeles opacos. En los últimos años, en el mundo los “sex shops” cambiaron de packaging y también de concepto.
En las principales ciudades del mundo mutaron a estéticas más amigables al gusto del público masivo, especialmente femenino, y orientaron sus catálogos a productos que representan novedades tecnológicas y descubrimientos “científicos”.
Tonos pastel, cursos y campañas públicas de salud son parte de la oferta de las parafarmacias eróticas. Foto: Gentileza Dolce Love
¿A quienes está destinado?
Con esto en vista, en 2014, la firma española Dolce Love decidió abrir su primer local en Madrid bajo la denominación de “parafarmacia”: un lugar en el que se preparan y distribuyen productos no medicinales pero sí destinados a la salud. En este caso, a la salud del deseo.
En dos años abrieron siete tiendas más. Además, a fin de responder a la demandas de los nuevos clientes, que buscan asesorarse sin sentirse avergonzados, la Dolce Love contrató entre su staff a sexólogos y capacitó a su vendedores para responder las consultas de manera discreta e interesante.

Aunque este tipo de tiendas no están exclusivamente dedicadas a las mujeres, el 80% de las compras las realizan ellas. Se estima que poseen un nivel socio económico y cultural medio-alto y que suelen gastar aproximadamente 60 euros por visita a la tienda. Entre sus productos favoritos se encuentran los vibradores, los geles estimulantes y probablemente gracias a fenómenos como “50 sombras de Grey”, las vendas.
Producción intelectual
La oferta no se reduce solo a productos. Estos nuevos modelos de sex shops convocan a escritores, periodistas y artistas, mayormente femeninos, para que generen contenido erótico con sus productos a través de blogs y canales de You Tube.
Actualmente, la cara de una de estas marcas es Valérie Tasso, una intelectual francesa quien además de estudiar Ciencias Económicas y Lenguas Extranjeras Aplicadas, obtuvo un master en Dirección de Empresas por la universidad de Estrasburgo.
Tasso saltó a la fama cuando publicó su primera novela “Diario de una ninfómana” en las que además de contar experiencias personales, se atrevió a revelar el mundo erótico subyacente a la vida corporativa.
En Amsterdam, la tienda Cristine Le Duc brinda talleres de técnicas para hombres y mujeres y ofrece mensualmente una revista con informes escritos por expertos.
En Chicago, Early2Bed brinda consejería sentimental, videos tutoriales de sus productos y asesoramiento para sexo seguro.
El fenómeno responde no solo a la expansión del consumo femenino, también a un fenómeno creciente denominado “medicalización del sexo” que propone una manera “científicamente correcta” de disfrutar en la cama. Prueba de esto es que para la inauguración de su franquicia en el País Vazco, Dolce Love anunció que colaborará con el municipio en formación y cursos de sexología.