¿Qué vino tomamos para Thanksgiving?
A la hora de servir el tradicional pavo asado, un vino de la uva Pinot Noir es sin duda tu mejor aliado
El gusto por el vino es como los amores, el mejor, será el que te gusta a tí.
Pero la realidad es que el arte de maridar correctamente un plato, es eso mismo, un arte. Aunque suene fancy y un poco a feria científica, tiene un propósito: buscas que el vino y la comida se complementen tanto entre sí, que ambos sepan mucho mejor juntos.
O sea, algo así como un buen matrimonio. Para eso se mide el nivel de acidez, alcohol, azúcar y otros factores más que harán que cada sorbo y cada bocado sean toda una experiencia religiosa.
A la hora de servir el tradicional pavo asado, un vino de la uva Pinot Noir es sin duda tu mejor aliado. Es ligero, de mediano nivel de alcohol, suave en el paladar y como decimos en inglés fruit forward, en otras palabras, que le resaltan las frutas rojas maduras.
Esta uva es original de Francia, pero también se cultiva en otras regiones. Dicen que la comida tradicional y el vino de la zona van bien, así que mi mejor sugerencia son los del estado de Oregon. Pero otras alternativas pueden ser los de Francia, Alemania y si quieres más drama, los de la Patagonia, Argentina.
Tu segunda opción y por cierto económica, será un vino de la uva Garnacha de España. Es también fruit forward. Y si sirves el pavo con el famoso gravy y cranberry sauce, harán buena pareja.
Si eres fan de las burbujas, te doy la buena noticia de que ellas maridan perfecto con todo. Por cierto, las burbujas rosadas serían una bendición. Compra un Cava blanco o rosado o un rosé sparkling wine de California, Argentina o un Cremant de Alsace, Francia.
Si tu pavo es frito, vete por las burbujas. Si tu pavo es bien picante, espaciado y si tiene toques asiáticos o está envuelto en bacon, un Riesling le sentará mejor.
Espero haberte convencido de que comprar el vino para el pavo…. ¡no muerde!