Colegios de NYC son más seguros que nunca según nuevo estudio
Los delitos graves cometidos en escuelas bajaron el pasado año académico en un 18% respecto al periodo 2015-16
El año escolar 2016-17 fue el más seguro desde que se llevan las estadísticas de los sucesos que ocurren las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York, y cada vez ocurren menos crímenes graves en los colegios de los cinco condados.
Así lo anunció este martes el alcalde Bill de Blasio en una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por el comisionado de Policía James O’Neill y la canciller de Educación Carmen Fariña.
De acuerdo a los datos compartidos, el número de arrestos y citaciones judiciales del último año disminuyó en un 18% respecto a los registros del periodo académico 2014-15, una estadística que confirma la seguridad en el sistema educativo en los más de 1,600 colegios que existen en la ciudad.
“Todos los estudiantes necesitan un ambiente de estudio seguro y comprensivo para tener éxito en las clases y crear un impacto positivo en la comunidad. Gracias a la colaboración y al duro trabajo del NYPD y del Departamento de Educación, las familias pueden estar tranquilas porque los colegios a los que asisten sus hijos son seguros”, afirmó De Blasio.
“Los resultados de nuestras inversiones para mejorar el clima en las escuelas y promover los programas de salud mental son claros: los crímenes en los espacios escolares están en su nivel más bajo, mientras que el número de graduaciones es más alto que nunca”, añadió el Alcalde.
El nuevo informe asegura que cada vez existen menos colegios señalados por el Departamento de Educación estatal como “persistentemente peligrosos”; de hecho, si se comparan los años escolares de 2015 y 2017, el número de escuelas con dicha clasificación ha bajado de 27 a sólo 2.
“Nuestra prioridad es lograr que los estudiantes y el personal docente estén seguros; una vez conseguido este objetivo, nuestros esfuerzos pasan a centrarse en promover los espacios educativos inclusivos e investigar sobre las causas subyacentes de los conflictos”, afirmó Fariña.
Como parte de su campaña para conseguir dichos objetivos, la Ciudad invierte cada año $47 millones con el fin de implementar los programas de salud mental escolares y dotar de mayores recursos a los colegios, una iniciativa que, por el momento, ha resultado muy positiva a la hora de reducir los problemas de los menores ante Justicia.