ICE presume la mayor acción contra supremacistas blancos
La Agencia colaboró en una investigación contra bandas extremistas
En medio de los cuestionamientos al presidente Donald Trump por tardar en condenar a los grupos extremistas, la Agencia de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) destacó la acción judicial más grande en los últimos meses contra grupos violentos de supremacistas blancos.
“Los fiscales del Distrito Norte de Texas han concluido lo que se cree el mayor enjuiciamiento en la historia de la nación de individuos conectados con violentas bandas de supremacistas blancos“, dijo John Parker, fiscal de ese Distrito, en un comunicado enviado por ICE.
Indicó que las sentencias a 89 miembros de la Hermandad Aria de Texas (ABT, en inglpes), el Círculo Ario, la “Pandilla Irlandesa”, los “Sucios Chicos Blancos”, los “Caballeros Blancos” y el “Peckerwood”, ubicados como supremacistas blancos, fueron por varios delitos, incluyendo narcotráfico, conspiración delincuencial y portación de armas.
“Estos grupos supremacistas blancos terminaron dedicándose al narcotráfico… Los acusados en este caso incluyeron a varios miembros de alto rango de estas organizaciones”, se agregó en el comunicado.
La detención de los criminales, cuyas sentencias suman más de mil años, fue posible por la colaboración de la Unidad de Pandillas del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS-CID) y la Unidad de Inteligencia Criminal del Departamento de Policía de Dallas con la asistencia de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), entre otras.
El caso no es nuevo, ya que data de antes de 2015, pero el jueves pasado fue condenado el último de los delincuentes, Jeramy Weatherall, de 29 años de edad, sentenciado a 20 años de cárcel.
De los 91 acusados, uno murió durante el juicio y uno más sigue prófugo y se cree que vive en México.
La muerte de Heather Heyer en Virginia reavivó la discusión sobre la operación de grupos extremistas blancos, pero fue la tardanza del presidente Trump en condenar a organizaciones como Ku Klux Klan y neonazis lo que encendió la preocupación sobre esos activistas de ultraderecha.