Cómo puedes evitar infecciones de la piel en el gimnasio

Es fácil ver cómo la tos, los estornudos y las manos sin lavar pueden diseminar rápidamente un virus que causa resfriados de una caminadora a otra. Pero, resulta que la mayoría de las infecciones que las personas adquieren en el gimnasio, son aquellas que afectan la piel.

Eso es porque las bacterias, hongos y virus que causan infecciones en la piel se desarrollan en el sudor que se deja en el equipo para ejercicio y las toallas, en las áreas húmedas como saunas, duchas y el piso de las piscinas.

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Por ejemplo, las investigaciones muestran que el estafilococo aureus resistente a la meticilina (MRSA), causa infecciones por estafilococo difíciles de tratar porque es resistente a varios antibióticos; puede vivir en las máquinas para ejercicio, alfombras y bancas por días.

“Las infecciones en la piel, incluyendo las causadas por el MRSA, son las que los atletas que participan en deportes que involucran contacto con la piel como el fútbol o la lucha libre reportan más comúnmente, pero la transmisión puede no presentarse necesariamente durante el deporte, sino antes o después de la participación; en las salas de casilleros, por ejemplo,” dice la doctora Amber Marie Vásquez M.D, oficial del Servicio de Inteligencia Epidémica en el área de Prevención y Respuesta de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). “Las heridas abiertas, higiene deficiente y el hecho de compartir toallas y equipo incrementan el riesgo”.

Los 5 tipos de infecciones a continuación, están entre los problemas de la piel más comunes que puedes adquirir en el gimnasio. Aquí te explicamos cómo localizarlas y tratarlas.

El pie de atleta y la tiña inguinal [jock itch]

Ambas infecciones son causadas por un grupo de hongos que crecen en áreas húmedas y tibias, incluyendo las toallas húmedas, ropa sudada y pisos mojados. Los hongos causan una alergia rojiza que causa una picazón de locura. La piel afectada también puede pelarse o descamarse y se pueden formar ampollas. Los hombres son más propensos a sufrir de tiña inguinal que las mujeres. Sin embargo, las mujeres pueden desarrollar infecciones por hongos bajo los senos, y además, ambos géneros pueden desarrollarlas en las axilas.

Tratamiento: lávate diariamente el área afectada con agua y jabón, y sécate muy bien. Un producto antihongos de venta libre que contenga clotrimazol (Lotrim AF y su genérico), miconazol (Micatin y su genérico) o terbinafina (Lamisil AT) curarán la mayoría de infecciones en un par de semanas. Si los síntomas continúan, consulta a tu médico, es posible que necesites una receta médica.

Foliculitis del Jacuzzi

La responsable es la bacteria psuedomonas aeruginosa, que se puede encontrar en las piscinas y jacuzzis cuando los niveles de desinfectantes como el cloro son demasiado bajos. (El mismo bicho causa el oído de nadador, una infección común del canal del oído externo.) La foliculitis del jacuzzi normalmente empieza con unas manchas que causan picazón en el área del bikini, que se convierten en una alergia con ampollas rojas. También se pueden formar ampollas con pus alrededor de los folículos capilares.

Tratamiento: Normalmente se cura en unos pocos días, sin necesidad de tratamiento. Consulta a tu médico si la alergia tarda más tiempo, es posible que necesites que te receten un ungüento con antibiótico o pastillas.

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Impétigo

Es una infección muy contagiosa normalmente causada por la bacteria estafilococo o estreptococo que llega a tu cuerpo a través de una abertura en la piel, como una cortada o una picadura de insecto. En algunos casos, el impétigo también puede invadir la piel sana. La bacteria crece en ambientes tibios y húmedos, además se transmite fácilmente con el contacto de la piel con alguien que está infectado o por medio de toallas o equipo deportivo contaminado. La infección normalmente empieza con pequeños granitos rojos parecidos a los barros que se llenan de pus. Después de unos días, los granitos se romperán y formarán una costra café amarillenta.

Tratamiento: Visita a tu médico. Si solo tienes unas manchitas en una pequeña área, normalmente una receta de tratamiento con una crema con antibiótico por 5 días curará la infección. (Los ungüentos con antibiótico de venta libre no funcionan muy bien contra el impétigo). Si la infección es severa o muy grande, tu médico probablemente te recetará un antibiótico oral.

Verrugas plantares

Son causadas por el virus de papiloma humano, o HPV, que puede causar una infección en la piel, en la planta de los pies si caminas descalzo en la sala de casilleros o las duchas. (El daño del HPV que causa las verrugas plantares es diferente que el que causa las verrugas genitales). Se puede formar una mancha callosa y dura, y puede doler al caminar. Pueden aparecer pequeñas manchas negras en la superficie de la verruga, como resultado de las manchas de sangre seca de los vasitos que la alimentan.

Tratamiento: Primero, aplica un producto tópico de venta libre que contenga ácido salicílico (CompoundW, DuoFilm y sus genéricos); ten en mente que puede tomar varias semanas para que veas resultados. Si las verrugas persisten, duelen mucho o sangran, o si tienes muchas, consulta a tu médico; te la pueden congelar con nitrógeno líquido, y cortarla, o quitarla con láser. Las personas con diabetes deben consultar a su médico antes de tratar las verrugas plantares o cualquier otro problema en los pies, ya que esta condición aumenta el riesgo de infecciones graves en los pies.

Infecciones por estafilococo o MRSA

La bacteria estafilococo detrás de estas infecciones se encuentra normalmente en la piel o en la nariz de una persona sana, dice Vásquez. Las investigaciones muestran que aproximadamente un tercio de las personas portan una variedad de bacterias estafilococo y cerca del 2% alberga la forma resistente al antibiótico MRSA. Esta bacteria puede infectar la piel ingresando al cuerpo a través de cortadas o abrasiones. Hasta una cortada mientras te rasuras o un barrito puede ser el lugar para mantener a estos gérmenes. En su etapa temprana, la infección por el estafilococo o el MRSA parece una picadura de insecto o de araña. La ampolla puede tornarse roja, hincharse, ponerse tibia al tacto y doler, además de llenarse de pus o de otro líquido. En algunos casos, las personas con esta infección presentan fiebre.

Tratamiento: Visita a tu médico. Es muy importante buscar atención médica pronto, si tienes lo que parece una picadura infectada o te está subiendo la fiebre. Sin tratamiento, el MRSA puede desarrollar una sepsis, una reacción potencialmente mortal del cuerpo a la infección. Algunos antibióticos funcionarán contra el MRSA.

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Por supuesto, la mejor manera de tratamiento es la prevención. Sigue estas 6 estrategias para minimizar el riesgo de contraer una infección de la piel en tu club deportivo.

• Verifica la limpieza del gimnasio. Pregúntale al gerente sobre la rutina de limpieza de las instalaciones. “El gimnasio y las salas de casilleros deben limpiarse por lo menos una vez al día con detergentes o desinfectantes registrados por la Agencia de Protección Ambiental (EPA),” dice Vásquez. Cuando hagas esta verificación del gimnasio, revisa si hay disponibilidad de toallitas o aerosoles desinfectantes para limpiar el equipo compartido antes y después del uso. El equipo debe tener buen mantenimiento, no debe tener superficies dañadas, como un asiento roto, que dificulte la limpieza del mismo, informa Vásquez. “También, los baños y salas de casilleros deben ser abastecidos con jabón líquido o desinfectante de manos a base de alcohol”.
• Protege tu piel. Mantén las cortadas y raspones limpias y cúbrete con un vendaje hasta que sanen. Utiliza una barrera como ropa o una toalla entre tu piel y el equipo que otros utilizan, como el equipo de pesas y las bancas del sauna. Utiliza siempre sandalias o zapatos de agua en áreas húmedas.
• Trae tu propia alfombra de ejercicios. Es posible que no limpien las alfombras del gimnasio, como las que se usan para practicar yoga, entre clases, así que lo más seguro es llevar la tuya.
• Adquiere buenas prácticas de higiene. Lávate las manos antes y después de practicar deportes o utilizar equipo compartido. Si no hay disponibilidad de agua y jabón, los CDC aconsejan utilizar un desinfectante de manos que tenga por lo menos el 60% de alcohol. Utiliza aerosoles o toallitas para desinfectar el equipo del gimnasio antes y después de usarlo. Báñate después de ejercitarte o utilizar un jacuzzi o la piscina.
• Lava tu ropa. Guarda la ropa sudada, trajes de baño y toallas usadas en una bolsa plástica, separada del resto de tu ropa y lávala después de usarla. “La evidencia muestra que la cantidad de bacterias aumenta cada vez que usas ropa sin lavarla”, dice Vásquez. El calor mata las bacterias, así que ella aconseja lavar y secar todo con la temperatura más elevada posible según la etiqueta.
• Sé  egoísta con tus cosas. Evita compartir objetos personales que toquen la piel desnuda, como rasuradoras y toallas.

Nota del editor: el financiamiento para la preparación de este artículo fue proporcionado por Atlantic Philanthropies y gracias a un subsidio del programa estatal Attorney General Consumer and Prescriber Education Grant, financiado por el acuerdo multiestatal de reclamos de fraude de los consumidores en relación con la comercialización del medicamento de venta con receta, Neurontin (gabapentina).