Año escolar en NYC arranca entre retos, nuevos programas y emoción
Este miércoles más de 1.1 millón de estudiantes iniciaron clases y la Ciudad anunció más sillas para preescolar, programas de alfabetización y planes de apoyo
Luego de unas largas vacaciones de verano, este miércoles se dio inicio al nuevo año escolar en más de 1,800 escuelas de los cinco condados de la Gran Manzana. Y aunque para la gran mayoría del millón 100 mil alumnos fue el momento para reencontrarse con sus amigos y profesores, para otros como Joseph Espinoza, de solo 4 años, ir a su escuela en East Harlem fue una experiencia nueva y toda una aventura.
Así lo confesó la madre del pequeño, Hilda Basorto, quien a las 2:00 de la tarde fue a recoger a su hijo a la escuela, tras terminar el primer día de clases en prekinder y la emoción era evidente.
“Estamos muy contentos de que él ya esté estudiando. Mi esposo lo llevó esta mañana y yo lo vine a buscar y se la ha pasado diciéndome que le gustó mucho la escuela y que la maestra se portó muy bien con él”, aseguró la mexicana, originaria del estado de Guerrero. “También me dijo que estuvieron cantando muchas canciones y hasta se aprendió un pedacito”, agregó la orgullosa madre, mientras le cargaba la mochila a su niño y el pequeño llevaba en su mano una loncherita con varios muñecos.
La mamá de Joseph, vestido con una camiseta roja que estaba estrenando, agregó que su hijo estuvo muy ansioso los días previos al inicio de clases, pues quería que llegara rápido el día de estrenarse también su maleta y llevar los útiles.
“Él es muy inteligente y yo quiero que aprenda mucho en la escuela, que aprenda más cosas y que aprenda inglés, porque en la casa hablamos solo español y mixteco (lengua indígena)”, manifestó la mexicana, quien defendió que la educación es lo que más brinda oportunidades a los jóvenes.
Más cupo en las escuelas
Precisamente Joseph es uno de los miles de niños que se están beneficiando del incremento de sillas de educación preescolar en varias escuelas públicas, como la PS 377 de Queens, a la que el alcalde Bill de Blasio madrugó para dar la bienvenida a los estudiantes. Allí, el mandatario destacó la importancia de la expansión de la educación inicial para los más pequeños, incluidos los de 3 años.
El plan de la Ciudad es que para el otoño de 2021 haya más de 19,000 cupos de 3-K en 12 distritos en los cinco condados, con un costo de $203 millones, financiados por la Ciudad.
“Durante demasiado tiempo, la ciudad de Nueva York estaba dividida. Algunas personas podían permitirse un comienzo temprano y otras no. Es por eso que hemos hecho de la educación de la primera infancia una prioridad desde el primer día y por eso hemos trabajado para expandir nuestros programas para llegar a todos los niños independientemente de su código postal o nivel de ingresos”, dijo De Blasio. “No hay nada más importante que desbloquear el futuro de nuestros neoyorquinos más jóvenes y estamos encantados de darles la bienvenida a nuestros estudiantes para lo que será otro año escolar exitoso”.
Entre tanto, el canciller de Educación Richard Carranza, estuvo desde temprano acompañando a los niños en un autobús escolar desde la Avenida 159, en Howard Beach, en el cual se encontró con varios chiquillos de primer grado como Miabella Salas, de 6 años, residente de Ozone Park, quien le dijo al funcionario que quería reencontrarse pronto con sus amigos.
“Su consejo es ser amables con los niños, ella está de acuerdo con que debe tener almuerzo y va a ayudar a sus amigos”, dijo el jefe de las escuelas públicas de la ciudad. “Ella está preparada y lista para ir a la escuela”.
Tanto el Alcalde como Carranza aseguraron que las familias todavía pueden encontrar cupos para sus hijos en prekínder llamando al 311 o visitando el sitio nyc.gov/prek.
Asimismo, destacaron el programa “Alfabetización para todos”, que proporciona un entrenador de lectura u otros apoyos a las 792 escuelas primarias de la ciudad para garantizar que los estudiantes estén leyendo al final del 2 ° grado.
El objetivo de la iniciativa es tener al menos dos tercios de los estudiantes que lean con soltura al finalizar el 2° grado para el año 2022, y llegar al 100 por ciento para el 2026.