Atrevidas fotos de ex monja colombiana tras asegurar contrato como actriz porno en Miami
Tiene un acuerdo de exclusividad con una de las compañías más grandes de EEUU
El productor ejecutivo de BangBros, Cullen McRae, dijo que el estudio de Miami “no podría estar más orgulloso” de contratar a la ex monja colombiana Yudy Pineda.
“Su belleza, su cruda sexualidad y su deseo de compartir eso con sus fanáticos es algo que sabíamos que era extremadamente especial”, dijo McRae a AVN Media Network. “Su primera escena con nosotros muestra no sólo su pasión y sexualidad, sino también su fe, ya que colaboramos con ella para crear un tema basado en un convento… No tenemos ninguna duda de que estas escenas la convertirán en un nombre conocido”.
Pineda es una joven colombiana de 28 años, 8 de los cuales los pasó en un convento en Urabá, Antioquia. Ahora acaba de firmar un acuerdo exclusivo con una de las compañías de pornografía más grandes de EEUU, BangBros. Para el público debutará en una escena que se estrenará el 13 de enero, ambientada en un convento.
El cambio no fue fácil, considerando que Pineda había soñado con ser religiosa desde que era una niña, destacó New York Post.
A los 10 años “Estaba en la escuela cuando las monjas vinieron a visitarnos y supe que quería hacer eso”, dijo en una entrevista. Pronto comenzó a entrenarse para convertirse en una sierva de Dios.
Pero al alcanzar la mayoría de edad, dijo que se enamoró de un maestro religioso y decidió abandonar el convento. Tomó empleos en Medellín y fue entonces cuando fue descubierta por un reclutador de talento.
Comenzó a trabajar frente a las cámaras y luego decidió dar el salto a la pornografía. “Al principio me sentía mal, pero ahora estoy bien con eso”, dijo Pineda a los medios en su país.
“También me siento bien cuando voy a la iglesia. Nunca me pierdo las oraciones de los viernes, las reuniones de los sábados o la misa dominical”, afirmó.
Former nun-in-training Yudi Pineda is set to make her professional porn debut https://t.co/fPS9OdEF1N pic.twitter.com/BSLQLcLeYv
— New York Post (@nypost) January 3, 2019