¿Es el 2020 el peor año de la historia? La ciencia dice que hubo uno mucho peor
Si creías que la pandemia del coronavirus es lo peor que le ha podido pasar al mundo, ha habido catástrofes registradas el mismo año, en épocas anteriores
El año 2020 no pasará desapercibido en la posteridad. La pandemia del coronavirus afectó a todos los países del mundo en medidas distintas, pero nadie se salvó de vivir algún tipo de impacto social y económico. Sin embargo, en el momento de elegir el peor año registrado de la historia de la humanidad, la lista es larga.
Enfermedades, pestes y guerras azotaron a los hombres a lo largo de toda su existencia. Algunos de los peores años fueron según expertos fueron:
1349: del siglo XIV diezmó a la mitad de la población europea.
1520: la viruela devastó América y mató entre el 60 y el 90% de los pobladores originarios del continente.
1918: la gripe española provocó la muerte de más de 50 millones de personas.
1933: el auge de Adolf Hitler fue sin dudas un punto de inflexión no solo en el siglo XX, sino en toda la historia moderna.
Sin embargo, muchos investigadores no dudan en elegir al año 536 como el peor de la historia, tal como revela un artículo publicado en Medium.
De acuerdo al historiador medieval Michael McCormick, ese “fue el comienzo de uno de los peores períodos para estar vivo, si no el peor año”. Según explicó en la revista Science, ese año comenzó con una niebla inexplicable y densa que se extendió por todo el mundo y hundió Europa, Medio Oriente y partes de Asia en la oscuridad durante las 24 horas del día, por 18 meses.
Las temperaturas cayeron y como consecuencia, se vivió la década más fría en más de 2,300 años. Los cultivos se perdieron en todos los países europeos, asiáticos y africanos y la hambruna se expandió fuertemente. Este período de frío y hambre llevó a un estancamiento económico muy fuerte y en el año 541, un brote de la peste bubónica, conocida como Plaga de Justiniano, provocó la muerte de casi la mitad del Imperio Bizantino.
Las catástrofes que se vivieron ese año fueron producto de una causa natural. Gracias a investigaciones dirigidas por McCormick y el glaciólogo Paul Mayewski, se pudo conocer que una erupción volcánica en Islandia a principios de 536 provocó la propagación de grandes cantidades de cenizas en el hemisferio norte, creando la niebla que llevó al mundo a la oscuridad. Esta erupción fue tan inmensa que alteró los patrones climáticos globales y los cultivos de los años siguientes.