5 grandes razones para beber té de kombucha, avaladas por la ciencia

Hoy en día tenemos a la mano todo tipo de tendencias de nutrición, que se enfocan en crear hábitos y prácticas que nos acercan a un estilo de vida más saludable. Con base en esto existen alimentos que resultan el aliado perfecto para potenciar la pérdida de peso y sobre todo que se distinguen por sus inigualables beneficios medicinales. 

En los últimos meses ha llamado de manera especial la atención la kombucha y su consumo ha sido considerado parte importante herramienta en diversas corrientes de medicina natural, herbolaria y fitoterapia. Más allá de estar de moda, la kombucha es una bebida antigua que es consumida hace miles de años. Es un té fermentado que no sólo se asocia con grandes bondades curativas y también es una bebida rica en probióticos benéficos para el organismo.

Otro de sus grandes valores se encuentra en su poder antioxidante, que se asocia con cualidades para matar bacterias dañinas y combatir diversas enfermedades. Esto se debe a su inmensa capacidad de fortalecer las defensas y la microbiota. 

Beneficios de la kombucha, respaldados por la ciencia:

1. Poderosa fuente de probióticos

Sin lugar a dudas la kombucha es uno de los alimentos fermentados más valorados por su contenido en probióticos. Esto se debe a que es una bebida que se elabora agregando cepas específicas de bacterias, levaduras y azúcar al té negro o verde, para después permitir su fermentación por una semana o más. Lo que sucede en el proceso es que las bacterias y levaduras forman una capa en la superficie del líquido (similar a un hongo) y es por ello que muchos también la llaman popularmente “té de hongos.” Durante la fermentación se produce ácido acético y láctico, que se relacionan con sus propiedades probióticas que potencian la salud. Son un alimento saludable para las bacterias benéficas del intestino, lo que se relaciona con grandes beneficios para mejorar la digestión y combatir las afecciones más populares, como gastritis, colitis, gases e inflamación.

2. Gran antioxidante

Últimamente se habla mucho de los antioxidantes y sus grandes beneficios para la salud. Entre los principales se destaca su efecto para combatir a los radicales libres, sustancias nocivas que se relacionan con la aparición de numerosas enfermedades degenerativas y el envejecimiento prematuro. Este contenido en compuestos bioactivos y antioxidantes hace que el consumo de kombucha sea un popular remedio para depurar al hígado de toxinas de tal manera que beneficia su funcionamiento y se relaciona con grandes propiedades hepaprotectoras. También este poder antioxidante le confiere magníficos beneficios para reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer. 

3. Contra las bacterias

Una de las grandes bondades de la kombucha es su poder antibacteriano. Como lo mencionamos previamente durante el proceso de fermentación se produce una sustancia llamada ácido acético y polifenoles, los cuales se relacionan con beneficios para eliminar del organismo a una larga lista de microorganismos que son agentes dañinos para la salud y que son responsables de diversas enfermedades e infecciones. 

4. Mejora la salud cardiovascular

Las afecciones cardíacas son la principal causa de muerte en el mundo y en muchas ocasiones se derivan de un estilo de vida y alimentación deficiente. Beber de manera habitual kombucha es un gran aliado en la prevención de enfermedades cardíacas, esto se debe a que sus compuestos bioactivos tienen la capacidad de regular los niveles de colesterol en la sangre. Protege a las partículas de colesterol de la oxidación y mejora los marcadores: elimina el colesterol malo “LDL” y aumenta el bueno “HDL.”

5. Buen aliado contra la diabetes

Otro de los temas de salud más preocupantes en la actualidad es la diabetes, considerada una enfermedad crónica con graves consecuencias para la salud. Hoy en día afecta a más de 300 millones de personas en el mundo y se caracteriza por los altos niveles de glucosa en la sangre o una resistencia a la insulina. Está comprobado que la kombucha tiene la gran capacidad de ralentizar la digestión de los carbohidratos y esto hace que se regulen los niveles de azúcar en la sangre. También se asocia con beneficios para mejorar el funcionamiento hepático y renal.