3 deliciosas y saludables sopas de otoño que reconfortan y suben las defensas del cuerpo
Las sopas son el platillo estrella del otoño, son cálidas y ricas en nutrientes esenciales que protegen al sistema inmunológico
El otoño anuncia su llegada y es la estación del año perfecta para crear deliciosos platillos elaborados con maravillosos ingredientes de temporada. Lo cierto es que esta época del año se caracteriza por un descenso en la temperatura ambiental y es el momento ideal para reconfortarnos con alimentos cálidos.
Las bajas temperaturas nos hacen más propensos a contraer enfermedades e infecciones causadas por virus y bacterias, de hecho los casos de gripes y resfriados aumentan considerablemente. Es por ello que las sopas son uno de los platillos estrella del otoño, no sólo ayudan al cuerpo a entrar en calor, son hidratantes y muy ricas en nutrientes.
Las sopas también son el aliado perfecto para aumentar el consumo de vegetales, por lo tanto se caracterizan por su contenido en vitaminas, minerales, antioxidantes esenciales y fibra, gracias a ello son perfectas para proteger y fortalecer al sistema inmunológico. El consumo de sopas en temporada de frío es clave en la prevención de enfermedades como es el caso de diversas afecciones en vías respiratorias.
Por si fuera poco las sopas son saciantes y muy fáciles de digerir, lo que se relaciona con extraordinarios beneficios para la salud digestiva e intestinal. También son un buen complemento dietético en el control del peso corporal. Lo mejor de todo es que las sopas contribuyen a una alimentación variada, al ser un alimento versátil y equilibrado permiten inigualables combinaciones con el uso de ingredientes sumamente benéficos como es el caso del pescado, pollo, carne, hierbas de olor, arroz, legumbres, vegetales y especias, todos de gran potencial medicinal. Te invitamos a conocer tres grandiosas recetas de sopas de otoño: exquisitas, saciantes y muy saludables. Lo mejor de todo es que son muy fáciles de preparar y de lo más reconfortantes.
1. Sopa de tomate rostizado
El tomate es uno de los ingredientes más básicos en todas las cocinas a nivel mundial, no solo es valorado por su delicioso sabor y múltiples utilidades, se destaca por su inigualable potencial nutricional y medicinal. El tomate es muy rico en agua, por lo mismo se trata de una hortaliza con muy bajo aporte calórico, adicionalmente contiene azúcares y ácidos orgánicos, como es el caso del málico y cítrico. Sus beneficios para proteger al sistema inmune y potenciar las defensas de manera natural, radican en su contenido en tres vitaminas antioxidantes: C, E y A. Esta sopa es un tesoro nutricional ya que contiene ingredientes sumamente curativos como el aceite de oliva, el ajo, la cebolla, el tomillo y también aporta mucha energía gracias a su contenido en arroz.
2. Sopa de lentejas, tocino y zanahoria
Esta sopa de lenteja en verdad es una comida completa, de lo más nutritiva, generosa y saciante. Su inmenso potencial nutricional se relaciona en principio con las lentejas, que se destacan por ser una legumbre con un alto contenido en proteínas de origen vegetal, hidratos de carbono y mucha fibra. Otro de sus puntos fuertes se debe a su riqueza mineral sobre todo en hierro, potasio, calcio, fósforo, magnesio, zinc y selenio. Lo cierto es que son ligeras, muy nutritivas, fáciles de digerir y protegen al sistema nervioso y cardiovasacular, a la vez su aporte en minerales esenciales resulta clave para fortalecer al sistema inmunológico. Lo mejor de todo es que se trata de una sopa de gran sabor y consistencia, perfecta para hacer frente a los días lluviosos y fríos.
3. Crema de flor de calabaza
La flor de calabaza es el fruto de los calabacines y es uno de los ingredientes más representativos del otoño. Se caracteriza por ser un alimento muy versátil y nutritivo, entre sus más grandes ventajas se destaca por su alto contenido en vitaminas A, C, B1, B2, B3 y B9, también es muy rica en minerales entre los que se encuentra el hierro, calcio, fósforo, potasio y magnesio. Es sumamente hidratante, baja en calorías y con muy bajo aporte calórico, es reconocida como un gran aliado para el sistema inmunitario ya que fomenta la formación de glóbulos blancos y previene contra el ataque de agentes infecciosos. Es un magnífico ingrediente para aprovecharse en sopas y cremas, el resultado es inigualable.