Insultos de su jefe de prensa ponen a Romney en apuros (fotos)
La gira del republicano en Varsovia estuvo marcada por los tropiezos.
Varsovia/Berlín (EFE).- El aspirante republicano a la presidencia de EEUU, Mitt Romney, cerró hoy en Varsovia con un incidente con los medios una minigira internacional salpicada por los deslices en serie del rival de Barack Obama, a su paso por Reino Unido, Israel y finalmente Polonia.
El “último acto” de Romney en Polonia quedó empañado por los exabruptos de su jefe de prensa, Rich Gorka, a un grupo de periodistas que pretendían preguntar al candidato por el mal sabor de boca dejado en Reino Unido e Israel, sus anteriores etapas.
El aspirante a la Casa Blanca, que pretendía ganar perfil en el ámbito internacional con esta gira, provocó malestar en Londres, al poner en duda la seguridad de los JJOO, e indignación entre los palestinos, al convertir Jerusalén en la “capital” de Israel.
Romney empezó su visita a Polonia, ayer en Gdansk, invitado por el Premio Nobel de la Paz, exlíder de Solidarnosc y expresidente del país, Lech Walesa, en un guiño al electorado conservador por el aura de luchador contra el comunismo de su anfitrión.
El aspirante se reunió asimismo en esa ciudad con el primer ministro polaco, el liberal Donald Tusk, y siguió luego viaje a Varsovia, sin dar oportunidad a los medios de preguntarle por su balance de la visita.
Su agenda en la capital polaca estaba centrada en una ofrenda floral a la tumba del soldado desconocido, tras haber visitado lugares emblemáticos relacionados con el gueto de Varsovia y los héroes de la resistencia contra la ocupación nazi.
Ya en la etapa final de la capital polaca se produjo el último lamparón en la gira internacional, a raíz de los exabruptos de uno de sus asesores a periodistas, según relatan medios estadounidenses.
El incidente se produjo después de un encuentro con el ministro de Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, ante el que elogió la contribución de Polonia a las intervenciones militares de Irak y de Afganistán.
Varios representantes de los medios presentes trataron de acercarse al candidato para preguntarle por su serie de deslices anteriores, a lo que el portavoz de prensa Gorka, reaccionó insultando a los periodistas.
Según medios estadounidenses, Gorka se encaró a los periodistas y les espetó diciendo-“¡Bésame el culo!”, mientras el candidato subía a su automóvil para marcharse del lugar.
Poco después trató de disculparse y explicó que simplemente había perdido los nervios.
La gira de Romney se cerró con una visita a la biblioteca universitaria de Varsovia y un encuentro con el presidente de Polonia, Bronislaw Komorowski, centrado en el escudo antimisiles, las relaciones con Rusia y asuntos bilaterales.
El equipo del político había diseñado su gira partiendo de Reino Unido, como aliado tradicional transatlántico, y con Israel como siguiente etapa, con clara intención de ganarse el voto projudío, para lo que hizo valer su vieja amistad y cercanía política con el primer ministro, Benjamin Netanyahu.
Romney pretendía reprochar así a Obama no haber cuidado debidamente la relación bilateral con Londres y Jerusalén, pero el resultado ha sido claramente desfavorecedor para el aspirante.
Los deslices de Romney contrastan con el éxito de la mediática operación lanzada desde Berlín por el entonces candidato demócrata a la Casa Blanca, Obama, en 2008, meses antes de las elecciones.
El equipo de campaña del entonces aspirante demócrata organizó un mitin perfecto, junto a la Columna de la Victoria, que congregó a 200,000 personas, en su mayoría jóvenes.
Obama desplegó carisma y desató el entusiasmo de la multitud, al presentarse sonriente ante la multitud “no como un candidato, sino como un ciudadano del mundo”, con un discurso de 25 minutos.
El entonces aspirante se tomó así la revancha a la negativa de la canciller Angela Merkel a autorizar el mitin ante la emblemática Puerta de Brandeburgo, con el argumento de que era apenas un candidato, no un presidente.