Carros usados, qué saber si va a comprar uno
La compra y el precio de estos autos se ha disparado durante la pandemia
La COVID ha cambiado mucho las circunstancias sociales, agravando y acelerando tendencias y dando la vuelta a otras. Una de estas tendencias ha sido relativamente sorprendente y ha ocurrido en el mercado de carros usados. Las ventas se han disparado y los precios también.
Según las cifras relativas a la inflación en octubre, en materia de carros usados los precios han subido una media del 11% en los últimos 12 meses.
¿Por qué este aumento de ventas?
Muchas personas han decidido mantenerse lejos de los medios de transporte colectivo y han optado por la posibilidad que les ofrecía mejor precio.
Otra situación es que la crisis económica y la incertidumbre inclina a muchos consumidores por elegir dentro del mercado más barato que es el llamado pre-owned.
Adicionalmente, la COVID cerró fábricas inicialmente y hay quien no pudo o quiso esperar por un auto nuevo y ha decidido hacerse con uno ya usado en buen estado.
En Estados Unidos se suelen vender unos 41 millones de autos usados anualmente y esta cifra será mucho mayor cuando se cierre 2020.
¿Por qué el aumento de precio?
Es un factor de la oferta y la demanda. Cuanta más demanda, más suben los precios pero además es que ha faltado oferta.
Ha habido poco inventario porque el mercado de carros está muy ligado al mercado general en el que hay carros que se revenden después de nuevos o se devuelven porque son un lease. Cuando los consumidores no han podido o querido comprar uno nuevo por el motivo económico personal o porque tampoco lo iban a usar mucho más que para recados locales, dada la situación, la venta del carro como usado no se ha materializado. Algunos negocios de ventas de autos usados están sufriendo por esto y ha habido cierres por ello.
Según Edmunds.com los precios han estado “red hot”, es decir carísimos durante el verano pero ahora están empezando a bajar un poco.
¿Cómo comprarlos?
El mercado de carros usados tiene sus particularidades, son más baratos pero hay que asegurarse la calidad de lo que se compra para que merezca la pena. Considere lo siguiente antes de salir manejando uno:
- Asegurarse de que se tiene un presupuesto y una financiación para ello.
Es fácil llegar con una cifra a la cabeza de lo que se puede gastar y salir con un carro que cuesta más. Pero hay que hacerlo de forma realista y ser firme. Llevar un presupuesto ayuda a negociar con más eficacia. No mire el costo del auto mensualmente, para conocer el verdadero costo hay que ver cuántos meses va a tener que hacerse cargo de estos pagos.
Además de mantenerse dentro de lo presupuestado de forma realista hay que tener la financiación para ello. Lo mejor es ir a comprar el carro con la financiación preaprobada por una entidad bancaria o uniones de crédito que tienen más ofertas que un concesionario. Es importante asumir que es más cara la financiación de un carro usado porque el aval del prestamista es el carro y vale menos uno usado que uno nuevo.
Como en cualquier otra compra, compare ofertas y no se olvide de mirar su calificación crediticia para poder acceder a un crédito más barato. Cuanto más elevada más facilidades tendrá para ello.
En Nueva York la guía de derechos del comprador recuerda que se tiene derecho a comprar el carro al precio que se anuncia, a conocer los detalles del acuerdo de financiación antes de firmarlo y a rechazar la financiación del vendedor.
En caso de que se compre con la financiación del vendedor, la ley federal requiere que se tengan por escrito lo acordado en términos de tasa anual o APR, la cantidad de lo financiado y el total de lo que se tiene que pagar para satisfacer totalmente los términos del acuerdo.
Algunas legislaciones locales obligan a que se detalle las comisiones de financiación y que el lenguaje del contrato sea en el que se ha negociado.
- Garantías
La Comisión Federal de Comercio tiene una regla desde 1985 que requiere que los carros tengan una información pegada en la ventana conocida como el Buyers Guide. En ella se ofrece información sobre si hay garantía en el carro y con qué condiciones: duración, condiciones, porcentaje de costos de reparaciones y qué partes de la mecánica y marco del automóvil están cubiertos.
Para evitar problemas técnicos no se le olvide consultar el informe de historia del vehículo y conducirlo. Si el vendedor no le deja hacer esta prueba o no le da el informe del vehículo, considérelo como una mala señal y acuda a otro vendedor. En cualquier caso es importante que lo revise un técnico antes porque algunos de los problemas del carro pueden no haber llegado al informe (los arreglos que no pasan por el seguro por ejemplo) o no son detectables en un primer examen de conducción.