Colombiano se declara culpable Narco colombiano se declara culpable en Florida
Habría importado cientos de kilogramos de cocaína a EEUU
FORT LAUDERDALE, Florida.- Un exjefe del Cártel del Norte de Cali, por quien Estados Unidos ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares, selló ayer un acuerdo con las autoridades y se declaró culpable de narcotráfico ante un juez federal del sur de Florida.
Ramón Quintero Sanclemente, de 54 años, se dijo culpable ante el magistrado William Dimitrouleas de asociación ilícita para importar cocaína a EEUU entre 1998 y 2008, una de las cinco acusaciones que enfrenta.
“Completamente, señor juez”, expresó Quintero en español cuando el magistrado le preguntó si quería declararse culpable después de haberle advertido que con el acuerdo de culpabilidad renunciaba a su derecho a apelar la sentencia y podría ser deportado a Colombia al concluir su condena.
En la audiencia de poco más de media hora realizada en los tribunales federales de esta ciudad vecina a Miami el colombiano cambió su declaración, ya que a principios de 2012 se había declarado inocente. El juez había fijado el inicio del juicio para el próximo lunes, pero con el acuerdo que firmó con la fiscalía Quintero evitó ese proceso.
Con la esperanza de obtener una reducción en sus penas, muchos narcotraficantes colombianos sellan acuerdos con el Gobierno estadounidense y se declaran culpables de algunos de los cargos que enfrentan.
A través de estos pactos, los fiscales suelen desechar otras acusaciones y recomendar al juez una condena más leve de la que les impondrían en un juicio. Los acusados, por su parte, se comprometen a colaborar con las autoridades como testigos en otros casos u ofreciendo información para investigaciones.
Parado junto a su abogado Guy Turner, Quintero lució tranquilo durante la audiencia; solo habló para responder a las preguntas de Dimitrouleas; llevaba sus manos esposadas y tenía grilletes en sus pies.
El colombiano, que dijo que sólo sabía leer y escribir en español y había terminado el bachillerato en su país, utilizó auriculares para escuchar la traducción simultánea de la audiencia del inglés al español; estaba vestido con camisola y pantalón de presidiario de color beige.
En la sala judicial estaba también el fiscal Adam Fels.
Dimitrouleas le advirtió al colombiano que la acusación que enfrenta conlleva una pena mínima de 10 años de cárcel y una sentencia máxima a cadena perpetua. Sin embargo, debido a un tratado que existe entre EEUU y Colombia, no sería condenado a vivir de por vida en una cárcel.
El otro acusado del caso, Mario Satizabal, fue condenado a principios de enero a poco más de 19 años de cárcel y libertad condicional por otros cinco años.
El juez dijo que revelará la condena de Quintero el 19 de noviembre.
Aunque no leyó el pacto firmado por el acusado y la fiscalía, señaló que en el documento de siete páginas las autoridades se comprometieron a desistir de las otras cuatro acusaciones que enfrenta Quintero en la audiencia de la sentencia.
Entre esas acusaciones figura un cargo de lavado de dinero proveniente del narcotráfico, que conlleva una condena de unos 20 años de prisión.
Quintero, por su parte, se habría comprometido a colaborar con el Gobierno.
Conocido como “RQ” y Ramoncito, Quintero -quien le dijo al juez que en Colombia trabajó en el sector comercial y agrícola- fue extraditado desde su país el 12 de diciembre de 2011 y desde entonces permanece preso en el sur de Florida.
Documentos presentados por la fiscalía aseguran que Quintero fue uno de los jefes del Cártel del Norte del Valle. Al ser arrestado en abril del 2010, la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro lo calificó de narcotraficante.
Según documentación de la agencia antidrogas estadounidense citada por los abogados de Quintero en documentos judiciales, el colombiano habría importado cientos de kilogramos de cocaína desde Colombia a EEUU desde al menos enero de 1998.