Inmigrante despertaba admiración por sus logros hasta que la DEA descubrió que estaba ligado al narcotráfico
Sergio Iván Blas alias “El Chaparro” confesó que gran parte de su riqueza se debe al dinero ilícito por de droga
LA DEA logró capturar a un inmigrante ejemplar que se hizo de dinero gracias al tráfico de drogas. Crédito: Eric Kayne | Getty Images
Familiares y amigos de Sergio Iván Blas alias “El Chaparro” lo veían con gran admiración por haber logrado rápidamente el sueño americano: lujos, autos y mucho dinero.
De acuerdo con Univision a través de la red social Facebook el inmigrante mexicano compartía fotografías donde se le podía ver comiendo en restaurantes de lujo o bien posando al lado de un super auto.
En una de esas imágenes alguien cercano le preguntó “Pues ¿Cómo le haces?” a lo que Sergio Iván Blas respondió “Trabajando todos los días”.
La imagen, que lleva por título “Regalo de Navidad”, llama la atención por dejarse ver posando al lado de una camioneta GMC Sierra de color azul y con unos rines gigantes.
Y sí, aquella camioneta la consiguió trabajando, pero en una red de distribución de drogas.
De acuerdo con los agentes antinarcóticos, el pasado 19 de octubre montaron un operativo de vigilancia en un aeropuerto de Indiana con el objetivo de conocer cuál era el objetivo de un avión privado con matrícula XA-UFF que transportaba a un solo pasajero; la DEA supo entonces que el avión llegó de Toluca, México.
A decir del medio antes mencionado, dos semanas después el mismo jet privado volvió a arribar a la Indiana procedente de Toluca y cargó combustible en Houston, Texas. En esta ocasión del vehículo aéreo descendieron varias personas y sacaron dos bolsas negras, dos maletas y una maleta gigante que tuvieron que bajar entre más de una persona.
Los pasajeros se dirigieron a un hotel al centro de Chicago, en Ilinois, donde ya los esperaban dos agentes encubiertos quienes encontraron 44 libras de droga. Ese mismo día por la noche la policía hizo una parada de tránsito donde incautaron cerca de 177 libras de cocaína.
El chofer, Rodrigo Jiménez Pérez, aceptó cooperar con la DEA y proporcionó su celular donde había evidencias para localizar a su jefe, Sergio Iván Blas.
Fue hasta el 4 de noviembre que la policía logró detener a “El Chaparro” mientras conducía un auto en Indianápolis y al ser interrogado confesó que llevaba entre cuatro y cinco meses recogiendo dinero ligado al narcotráfico.
La DEA aseguró en declaración jurada que Blas les dijo que el dinero provenía de la venta de marihuana, ya que así es como olía el dinero que llegaba hasta sus manos.
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