Si ya dejaste de fumar ¿qué sigue?

Felicidades, los beneficios en tu salud son instantáneos y en el plano emocional, ganas momento a momento, la seguridad y confianza que sólo un reto superado te puede brindar.

Ahora bien, ¿qué sigue? Adriana Ortemberg, autora del libro Quiero dejar de fumar para siempre de Editorial Océano, ofrece algunos consejos que pueden ayudarte a que sigas el proceso con mucho éxito, y que fortalezcas el proceso de desintoxicación y de salida del tabaquismo que lamentablemente sigue en aumento en el mundo.

“Si los primeros días te resultarán muy duros como para sentir que estar con fumadores te lo hace más difícil, busca la manera de evadirlos, pero es evidente que tendrás que convivir con ellos, así que en cuanto antes te fortalezcas, mejor. Recuerda que tienes poderosos motivos que te sustentan, has optado por una mejor calidad de vida y por hacer uso de tu poder personal”, explica la especialista.

De acuerdo a Adriana Ortemberg, es aconsejable que en los primeros días tomes algunas medidas que seguramente te ayudarán a seguir adelante con el proceso, principalmente en lo que toca a hábitos de higiene y alimentación, así que toma nota:

o Antes de ducharte, cepíllate el cuerpo en seco con un cepillo de cerdas o un guante de crin, de abajo hacia arriba. Este cepillado retira las células muertas y reactiva la circulación.

o Dúchate con agua tibia y si es posible, con jabón de romero ya que esta planta es un excelente estimulante natural. Termina el baño con agua fría.

o Desayuna y come de modo balanceado y con alimentos que te gusten, solamente evita el café. Aumenta tu consumo de líquidos y jugos naturales.

o Después de cepillarte los dientes, utiliza un enjuague bucal con algún elixir de menta u otro sabor que resulte fresco.

El eterno minuto

La especialista explica que si sientes la compulsión de fumar, no te preocupes, saldrás airoso de la prueba y sugiere que te tomes un minuto, respires lo más profundo que puedas por la nariz y reten el aire entre 5 y 10 segundos (si quieres relajarte), de 20 a 60 segundos (si quieres autocontrol) y luego expúlsalo lentamente por la boca hasta vaciar los pulmones.

Otra forma de cruzar ese instante, es echar mano de algún sustituto oral, por lo que ten a la mano alguno de los siguientes alimentos para ese momento de compulsión:

1. Semillas de girasol o calabaza.

2. Bastones de apio o zanahoria, que no sólo son buenos sustitutos orales, también tienen cualidades desintoxicantes.

3. Frutos secos como almendras, avellanas, nueces, pistaches y cacahuates.

4. Trae contigo una manzana, o en casa fruta que contenga mucha agua como la naranja, sandía o melón.

5. Palomitas de maíz, si estás acostumbrado a fumar saliendo del cine, lo que puedes hacer es comerlas en ese momento, en lugar de hacerlo cuando entras.

“Hasta los treinta o cuarenta días, las ganas de fumar se presentan con menos frecuencia e intensidad”, explica la especialista y finaliza: “Con la misma actitud –aunque no con la misma intensidad- que has afrontado el día 0, tienes que afrontar los meses siguientes. Un año de abstinencia es el tiempo de garantía que todos los métodos de deshabituación tabáquica consideran necesarios para dar el alta, pero ten presente que con un cigarrillo, una sola ‘calada’ es el primer eslabón de una cadena que hay que volver a romper”.

Recuerda todos los días las motivaciones que tienes para seguir adelante con este nuevo estilo de vida el cual se traduce en una larga lista de beneficios que son imposibles de contar.

Para saber más:

Consejo Nacional para las Adicciones

Centro de Orientación Telefónica:

http://www.conadic.salud.gob.mx/interior/cot.html

Teléfono (lada sin costo) 01 800 911 2000 para la República Mexicana

Colaboración de Fundación Teletón México.

“El principio de ser paciente es empezar con uno mismo”.

Bojorge@teleton.org.mx