Ola de calor en Estados Unidos se agravará durante el fin de semana; anticipan temperaturas de hasta 130 °F en algunas zonas
Las personas deben limitar las actividades al aire libre y tomar otras medidas de precaución
Las altas temperaturas que azotan varios estados del país esta semana se agravarán durante el fin de semana cuando zonas en demarcaciones como California podrían alcanzar los 130 °F.
Más de 100 millones de personas en el país enfrentan los peligros de las temperaturas abrasadoras, principalmente en el suroeste.
Sin embargo, estados del este como Nueva York y Florida también sienten los efectos.
Ciudades como Phoenix, Arizona, continuarán con la racha de calor tras romper un récord de más de dos semanas con temperaturas que superan los 110 °F.
En el caso de ciudades como Las Vegas, en Nevada, se le ha exhortado a los residentes que eviten salir al exterior entre las 9 a.m. y las 6 p.m. En la ciudad, se esperan el domingo temperaturas de 117 °F.
En el caso del Valle de la Muerte (Death Valley), en California, las máximas podrían alcanzar los 130 °F ese mismo día, anticipó el Servicio Nacional de Meteorología. Lo anterior se ha reportado en muy pocas ocasiones.
El Servicio Nacional de Meteorología (NWS) emitió avisos y advertencias para más de una docena de estados en el Oeste y Sur del país. Lo anterior significa que los residentes deben limitar las actividades en el exterior desde ya debido a la posibilidad de enfermedades provocadas por el calor extremo.
La ola de calor es resultado del cambio climático. La situación que experimentan los estadounidenses se suma al aumento sin precedente de la temperatura del océano en la costa de Florida y el Atlántico Norte, entre otros fenómenos que prueban la gravedad del problema.
El lunes, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) informó que la primera semana de julio se convirtió en la más caliente de la historia a nivel global.
Según los expertos, se están batiendo récords tanto en la tierra como en los océanos, lo que impacta de manera devastadora los ecosistemas y el medioambiente en general.
“Hay mucha preocupación entre la comunidad científica y existe un esfuerzo para tratar de entender estos cambios que estamos viendo. Es muy preocupante”, indicó Michael Sparrow, director de investigación de la OMM.