Donald Trump presionó a dos funcionarios en Michigan para que no certificaran las elecciones de 2020
Todo fue a través de una llamada el 17 de noviembre de ese año, dos semanas después de los comicios. William Hartmann y Monica Palmer ya habían votado a favor de certificar, pero después intentaron sin éxito revertir su decisión
El precandidato presidencial Donald Trump presionó a dos funcionarios de Michigan para que no certificaran las elecciones presidenciales de 2020, en las que resultó ganador el actual mandatario Joe Biden.
Todo fue a través de una llamada el 17 de noviembre de ese año, dos semanas después de los comicios.
El rotativo local The Detroit News señaló que, además de los dos funcionarios, que están afiliados al Partido Republicano, también participó Ronna McDaniel, presidenta del Comité Nacional Republicano.
En la conversación, tanto Trump como McDaniel presionaron a William Hartmann y Monica Palmer para que no legitimaran los resultados. Ambos son miembros del condado de Wayne.
“Tenemos que luchar por nuestro país. No podemos dejar que esta gente nos arrebate el país”, dijo el exmandatario en la llamada, y les advirtió que se “vería terrible” si certificaban el triunfo de Joe Biden.
William Hartmann y Monica Palmer ya habían votado a favor de certificar, pero después intentaron sin éxito revertir su decisión. Hartmann falleció en diciembre de 2021.
“Si pueden irse esta noche a casa, no lo firmen. Les vamos a conseguir abogados”, le habría dicho McDaniel a los funcionarios. “Nos encargaremos de eso”, garantizó el expresidente.
En Michigan, el demócrata Joe Biden ganó las elecciones presidenciales con 154.000 votos de diferencia (un 50,6% de Joe Biden contra un 47,8% de Donald Trump).
Según The Detroit News, la llamada la grabó una persona que se encontraba con Hartmann y Palmer. El contenido se hizo público el miércoles.
La publicación del rotativo local demostraría que Donald Trump estuvo implicado, de una forma importante y generalizada, en los intentos para revertir los resultados de las elecciones. Hasta ahora, el exmandatario mantiene su versión de que los comicios fueron robados.
La agencia de noticias EFE indicó que, días después de la llamada a los funcionarios de Michigan, el entonces presidente llamó a Brad Raffensperger, secretario de Georgia, para pedirle que encontrara 11.780 votos y así “darle la vuelta” a los resultados en ese estado.
Raffensperger grabó la llamada y la filtró. Se trata entonces de la principal prueba del caso criminal que enfrenta el magnate de Nueva York en un tribunal del estado, donde está acusado junto a 18 cómplices que formaron una “asociación delictiva” para revertir el triunfo de Biden en 2020.
Los fiscales quieren sentar a Donald Trump en el banquillo en agosto del próximo año, a solo tres meses de las elecciones. El expresidente podría ser condenado a un máximo de 76 años y medio de cárcel de ser hallado culpable de los cargos, según publicó la agencia de noticias.
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