Mujeres Destacadas 2024: Honorable Llinét M. Rosado

Si alguien busca problemas con Llinét M. Rosado, es mejor que lo piense dos veces. La honorable jueza, además de ser doctora en leyes, sabe taekwondo.

“Soy una mujer que sabe pelear”, dijo entre risas.

Lo cierto es que la mejor arma de la doctora Rosado es todo lo que conoce sobre la ley. Después de graduarse de la escuela de leyes, trabajó como abogada en la división de defensa penal de la organización Legal Aid Society. También fue guardián legal del Children’s Law Center.

Asimismo, fue la asistente legal de dos jueces de la Corte Suprema de El Bronx y abogada asociada de un juez de la Corte Civil de Nueva York.

En 2013 fue elegida jueza de la Corte Civil de la Ciudad de Nueva York y después fue asignada a la Corte Familiar. Desde 2019 es Jueza Asociada del Departamento de Apelaciones del Estado de Nueva York, 1er Departamento.

“Soy una abogada que puede ir a diferentes áreas de la ley”, dijo. “Cuando me hice juez me podían poner en cualquiera de las tres cortes”.

La jueza dice que no se hizo abogada para ganar dinero, su interés era encontrar soluciones para los jóvenes que representó cuando trabajó en el área penal.

“Eran niños de 18 años a los que les estaban dando 25 años de cárcel”, dijo. “Yo sentí que [al no ayudarlos] era parte del problema”.

Dos acontecimientos en su vida la hicieron decidir ser abogada. Uno fue la influencia de una tía que en República Dominicana –donde vivió sus primeros años– ejercía la abogacía, y la otra, haber crecido en los proyectos del Bajo Manhattan durante la crisis del crack.

“Se veían muertos en las calles, había muchos problemas con la policía”, dijo. “Ahí decidí que iba a ser abogada, que iba a representar a los pobres”.

Y como la jueza no es una mujer convencional, tiene un plan muy original entre manos, algo muy alejado de las cortes.

“Yo canto reguetón”, reveló. “Me gustaría hacer algo que pueda movilizar a los niños a través de la música; es mi sueño, y si algún día gano la lotería lo voy a hacer”.