Puertorriqueña crea perfumes de tamal, coquito y lechón
Las fragrancias realizadas por la bióloga Zorayda Ortiz ha tenido éxito en Chicago
Chicago, 23 de Enero – La bióloga puertorriqueña Zorayda Ortiz creó una línea de perfumes con esencias de comidas mexicanas como tamales y pan de muerto en el barrio hispano Pilsen, de Chicago.
Ortiz, fundadora de la compañía “LoveZoils”, dijo a Efe que su línea de perfumes “La 18” rinde un homenaje a este barrio mexicano en donde ella vive y el cual es un microcosmos de la cultura del vecino país con una variedad de restaurantes y vendedores ambulantes de tamales, champurrado y churros.
Ortiz, de 32 años, se mudó a Pilsen después de graduarse de la Universidad Northern Illinois (NIU).
Esta puertorriqueña que trabajó como investigadora en el centro médico de la Universidad Rush, comenzó hace muchos años a crear esencias y perfumes en su casa, los cuales vendía en las galerías de arte y cafés.
Llamó a su línea “La 18” por la calle principal de Pilsen y la cual hace referencia a una de las comidas más populares de este barrio- los tamales.
La línea de Ortiz, quien se define como “una artista de los sentidos olfativos”, contiene perfumes de tamal rojo con chile y de tamal de fresa.
El de tamal rojo con chile, por ejemplo, contiene extracto de chile, jengibre, gotas de piña y aceites de vainilla y sándalo de la India.
Ortiz creció en el barrio puertorriqueño de Humboldt Park, pero desde los 17 años visita Pilsen en donde trabajaba con una organización ambiental.
“Yo realmente amo a Pilsen como vecindario, yo amo la cultura mexicana que está enraizada aquí y la historia detrás de este vecindario”, afirmó.
Después de terminar su carrera, no dudó en regresar a Pilsen, un barrio en donde desde joven compraba churros y tamales en los restaurantes.
Ortiz lleva unos diez años creando esencias y perfumes, incluyendo productos de aromaterapia y tiene ya varias líneas de productos.
A fines del año pasado también desarrolló una línea de perfumes del Día de los Muertos, y entre los aromas que propone están el de pan de muerto, calavera de azúcar y uno de papel picado.
Actualmente está trabajando ya en otra colección llamada “Calle División”, nombrado así por la vía principal del barrio de Humboldt Park en la zona norte de la ciudad.
Entre las creaciones de esta colección, están los perfumes “Coquito” y “Lechón asado”, como homenaje a la cultura boricua.
Asimismo, Ortiz, quien también practica el ciclismo, ha creado una línea para los amantes de este deporte.
Antes de decidir qué tipo de perfume crear, la hispana dijo que primero medita sobre “diferentes frutas, esencias, comidas y objetos, cierro mis ojos, visualizo y rezo“.
Luego de decidir qué crear, le puede tomar horas o días identificar los químicos de un sabor para luego volverlo a reconstruir como perfume, agregándole mezclas de varios aceites individuales.
“Pienso no solo en los olores sino en el significado de algo, luego lo reconstruyo en una botella. Lo considero una forma de hacer arte”, dijo Ortiz a Efe en una entrevista en el restaurante Jam House, uno de los locales en Pilsen que ya distribuye su línea “La 18”.
Latinoamérica es esencialmente una enciclopedia de sabores y colores, afirmó la artista, quien tiene interés en crear esencias y aromas relativos a la cultura de estos países.
“Esencialmente tener cultura es parte de la ciencia de crear perfumes”, afirmó Ortiz.
“En Puerto Rico me puedo imaginar crear algún perfume de gardenias, mientras que en México hay mucho de que escoger”, señaló.
Hasta ahora el perfume más popular de su colección ha sido el perfume de tamal.
“La línea de perfumes ‘La 18’ es un homenaje a la cultura latina”, reitero Ortiz. “Yo creo perfumes con el conocimiento científico y mi experiencia, así que cuando yo estaba pensando en un tamal de la calle 18, pensé en qué puedo usar para crear esta aroma”, finalizó.