Yo he estado allí: ¿Por qué estoy poniendo dinero de vuelta en tu bolsillo?
Nadie debería tener que abandonar nuestro gran estado porque ya no puede permitirse vivir aquí
Desde el COVID, la inflación ha devorado los ingresos de los neoyorquinos. En tan sólo los últimos cuatro años, el precio de algo tan básico como una docena de huevos ha aumentado más del doble a nivel nacional. La leche cuesta un dólar más por galón, las hamburguesas han subido casi dos dólares más por libra y los pañales han subido siete dólares por paquete.
Cuando los costos de las necesidades básicas como estas se disparan, se hace mucho más difícil poner comida en la mesa. Muchos neoyorquinos todavía sienten el apuro. Saben que cada dólar cuenta. Se suma rápidamente, especialmente para una familia con niños pequeños o para personas mayores con un ingreso fijo.
Entiendo esta lucha intuitivamente. Vi a mis abuelos trabajadores de fábrica luchar en su vejez. Vi a mi madre criar una familia de ocho, estirando cada dólar comprándonos ropa usada y sirviendo sándwiches de spam frito para la cena. Cuando mi propia familia estaba empezando, tuve que dejar mi trabajo porque no podíamos encontrar cuidado infantil asequible.
Hice mis compras en tiendas de descuento y soñé con los días en que no tendríamos que pagar por la leche en polvo y los pañales.
Esta experiencia es la razón por la que, desde que me convertí en gobernadora hace tres años, mi máxima prioridad ha sido abordar la crisis de asequibilidad. Y también es la razón por la que, cuando presente mi nuevo presupuesto estatal en Albany el mes próximo, incluiré una nueva directiva histórica para devolver 3,000 millones de dólares en ingresos excedentes del impuesto a las ventas a los contribuyentes.
Según mi propuesta del plan de reembolso por inflación, si eres soltero y ganas menos de 150,000 dólares al año, recibirás un cheque de 300 dólares a finales del próximo año. Las parejas que presentan una declaración conjunta y ganan menos de 300,000 dólares al año recibirían un cheque de 500 dólares.
Este es tu dinero para comprar alimentos, ropa, medicamentos o para pagar el alquiler u otras facturas, o cualquier otra cosa en la que creas conveniente gastarlo.
Podemos hacer esto porque la alta inflación significó que la cantidad que el estado recaudaba en impuestos a las ventas aumentó. Personalmente, no creo que el estado deba gastar estos ingresos adicionales. Después de todo, es tu dinero. En cambio, debería dirigirse a un sólo lugar: De vuelta a tu bolsillo.
Esto podría beneficiar a 8,6 millones de hogares y marcar una diferencia real para los neoyorquinos de clase media. Podría ayudar a una familia joven a pagar cosas como alimentos, fórmula o pañales. Podría ayudar a una persona joven a pagar préstamos estudiantiles o alquiler. O podría ayudar a una persona mayor que lucha por pagar medicamentos y calefacción en el invierno.
Y esto es sólo el comienzo de mi agenda de asequibilidad para el 2025 en Nueva York.
Este innovador reembolso por inflación se basará en las medidas que ya hemos tomado para proteger a las familias de Nueva York y hacer de este estado un lugar más asequible para vivir y criar una familia.
Desde mi primer día en el cargo, hemos acelerado un recorte de impuestos para la clase media, hemos reducido los impuestos a la propiedad, hemos aumentado la oferta de viviendas para reducir los alquileres y hemos impulsado la asistencia para la matrícula, incluso, por primera vez, para los estudiantes a tiempo parcial. Mi administración también ha aumentado drásticamente el apoyo para el cuidado infantil, de modo que las familias que reúnen los requisitos puedan pagar tan sólo 15 dólares por semana.
Hemos aumentado el salario mínimo y lo hemos indexado a la inflación, y este año hemos implementado la primera licencia prenatal remunerada del país, de modo que las madres trabajadoras no pierdan ingresos cuando visiten a su médico. Estamos ayudando a cubrir las facturas de los servicios públicos y hemos enviado dinero a las familias para las compras de regreso a la escuela. Este verano, ayudamos a alimentar a casi 2 millones más de niños hambrientos con fondos directos para alimentos para los padres.
Mi enfoque en la asequibilidad no es nuevo. Me despierto todos los días pensando en una cosa: ¿Cómo puedo luchar por los niños y las familias de Nueva York? ¿Cómo puedo devolverles dinero a sus bolsillos?
Nadie debería tener que abandonar nuestro gran estado porque ya no puede permitirse vivir aquí. Creo que Nueva York debería ser un lugar donde la gente pueda salir adelante, no sólo sobrevivir.
Así que sepan que nunca he dejado, y nunca dejaré, de luchar por ustedes y sus familias.
Kathy Hochul es la gobernadora del estado de Nueva York.