Cancelan juego Wolves-Spurs en la Ciudad de México
Una densa capa de humo causada por la explosión de un transformador eléctrico dentro del inmueble 'Arena Ciudad de México', no permitió que se llevara a cabo el primer juego oficial de temporada de la NBA en la capital mexicana en tres lustros.
México.- La Asociación Nacional de Basquetbol (NBA) anunció, a través de su cuenta de Twitter, que el encuentro que debían sostener esta noche Timberwolves de Minnesota y Spurs de San Antonio en la Arena Ciudad de México, quedaba suspendido.
La decisión se tomó debido a la explosión de uno de los transformadores de este recinto ubicado en la delegación Azcapotzalco que causó una tremenda humareda, la que entró y cubrió toda la duela.
La NBA señaló que el partido que debía efectuarse esta noche será reprogramado para jugarse en la Ciudad de Minneapolis, donde juega el equipo de Minnesota como local, aunque todavía no ha se determinado la fecha.
La confirmación vino minutos después de que los dos equipos abandonaran la Arena Ciudad de México en sus autobuses para dirigirse a su hotel, ya que se consideró que no había las condiciones para realizar el partido.
Cuando los jugadores realizaban tiros de calentamiento, las luces de la arena se apagaron y se pudo apreciar mucho humo dentro de la arena.
Aún en sus uniformes, los jugadores abordaron los autobuses estacionados afuera del coliseo. A los periodistas y aficionados también se les ordenó evacuar el lugar.
“No nos dijeron lo que estaba pasando, sólo que saliéramos”, dijo Ricky Rubio, el base español de los Timberwolves.
“Yo pensé que estaban ensayando con fuegos artificiales”, contó Sean Elliot, comentarista de televisión de los Spurs. “Muchos equipos hacen eso antes de las presentaciones, pero el humo no paraba y no era humo blanco, era oscuro y cubrió toda la cancha. Fue algo inesperado”.
Aún no se había permitido la entrada de fanáticos a la arena para el primer partido de temporada regular de la NBA en México desde que Houston y Dallas se midieron en la capital el 6 de diciembre de 1997. En las afueras de la cancha, un helicóptero sobrevolaba la zona a la que también se habían desplegado policías.
Finalmente, fue tan intensa la humareda originada a causa de este desperfecto que casi dos horas después de que esto sucediera, la cancha seguía cubierta por una densa capa de humo.
La policía de la Ciudad de México informó en un comunicado que se trató de un conato de incendio, “provocado por un corto circuito en el cuarto de máquinas, en la cuarta planta” de la arena.
No hubo lesionados.