Un minuto de silencio en Dallas en memoria de JFK
Un minuto de silencio se realizó en la plaza Dealey justo en el instante y en el lugar donde hace 50 años dos disparos acabaron con la vida del presidente estadounidense
Dallas – En la plaza Dealey de Dallas a las 12:30 hora local, justo en el instante y en el lugar donde hace 50 años dos disparos acabaron con la vida del presidente estadounidense John F. Kennedy, se realizó hoy un minuto de silencio.
El minuto de silencio fue el momento central de un acto de homenaje que la ciudad rinde a Kennedy, y en el que se reprodujeron imágenes, se leyeron discursos y se interpretó música para subrayar el legado político y cívico que dejó al país.
Justo antes del momento, las autoridades, militares y ciudadanos con invitación para acceder a la plaza escucharon el repicar de campanas por todo Dallas en memoria de JFK, el primer presidente católico de Estados Unidos, el más joven en ser elegido y en morir.
La ceremonia también incluyó una invocación religiosa por parte del obispo de la diócesis de Dallas, Kevin J. Farrell, y un discurso del alcalde Mike Rawlings, quien elogió no sólo el legado y la personalidad del presidente asesinado, sino el “extraordinario coraje” de su esposa, Jacqueline, en aquellas horas trágicas.
El acto buscó un “tono solemne, comedido y digno para conmemorar la vida, el legado y el liderazgo del presidente John F. Kennedy”, resumió el alcalde de Dallas.
Con estos homenajes, Dallas busca redimirse del estigma de ciudad radical y violenta que arrastró durante años a raíz del magnicidio.
Entre los asistentes se congregaron varias generaciones –algunos recuerdan el día, otros ni habían nacido– que pretenden dejar constancia de lo que Kennedy aportó al país.
Estados Unidos está pendiente hoy de esta “reconciliación” de Dallas con la figura de Kennedy, las banderas de los edificios federales y estatales ondean a media hasta y en el área de Boston, de donde era originario el presidente, tienen lugar homenajes en la biblioteca presidencial y el museo dedicado a él.
Kennedy murió antes de acabar su primer mandato, a los 46 años, siendo el presidente estadounidense más joven en morir y el cuarto en ser asesinado en la historia del país.
Es considerado por los estadounidenses, de acuerdo con varias encuestas publicadas en estos días, como el mejor presidente de la historia del país.