Más indocumentados se preparan a cruzar la frontera
Quienes pasaron la frontera por la garita de Otay el lunes están detenidos en centro privado en San Diego, un hombre fue deportado
La campaña “Bring them home” (regrésalos a casa), se prepara para el cruce de otras 30 o 40 familias por la garita de Otay este jueves al mediodía mientras que los más de 30 que cruzaron el lunes, en su mayoría “dreamers” o jóvenes indocumentados que vivieron de pequeños en Estados Unidos, fueron trasladados al Centro Correccional de San Diego, una cárcel privada de la Corporación de Correccionales de América CCA.
“Mañana unos 30 o 40 más, padres y madres con sus hijos que son ciudadanos americanos van a cruzar…y otras más el domingo”, dijo Dulce Guerrero, portavoz de la Alianza Nacional de Jóvenes Inmigrantes (NIYA).
Un bebé de un año que cruzó en brazos de su mamá, Karen Ruiz, fue liberado a su tío, hermano de Karen, quien vino desde Arizona a recogerlo, dijo Guerrero. “Karen se quejó de que le dijeron leche estropeada a su hijo en el centro de detención”, agregó.
En las últimas horas se supo también que Dolores Lara, padre de Jessica y Elizabeth Lara, quienes aún viven en Yakima, Washington, fue deportado el martes por la mañana. Dolores y Jéssica, de 10 años, cruzaron el lunes con el primer contingente, tomados de la mano.
De los cinco niños que cruzaron el lunes, según el conteo original, sólo está detenida Stephanie González, de 12 años, quien es ciudadana, pero no ha sido liberada porque “no hay nadie que pueda recogerla”, dijo Guerrero. “Ella está con su papá, Manuel González”.
La portavoz indicó que hasta ahora ha recibido la llamada de 20 detenidos para confirmar su estado y lo que está pasando adentro. Se calcula que hay más de 30 aún adentro, la mayoría jóvenes “dreamers”.
“Los niños nos dijeron que a los papás los trataron mal, que los agentes se reían de sus camisetas que decían “bring them home””, dijo Guerrero. “Parece que el trato ha sido muy rudo en esta ocasión”.
En anteriores ocasiones que el grupo NIYA patrocinó el cruce de indocumentados pidiendo asilo o visa humanitaria, y particularmente en la última vez con el “Dream 30” en Septiembre, los padres con hijos ciudadanos fueron liberados casi inmediatamente con un permiso humanitario. Esto no está ocurriendo en esta ocasión.