‘Comunidades Seguras” queda oficialmente muerto
Da paso a una nueva era donde la prioridad para las deportaciones serán los inmigrantes indocumentados con récords criminales y sospechosos de terrorismo
El controvertido programa federal de Comunidades Seguras finalizó oficialmente este lunes, dando paso a una nueva era donde la prioridad para las deportaciones serán los inmigrantes indocumentados con récords criminales y sospechosos de terrorismo.
De acuerdo a un memorando enviado el pasado 20 de noviembre por la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) el programa de Comunidades Seguras finalizaría el 5 de enero del 2015 para dar paso al Programa de Ejecución Prioritaria, conocido por sus siglas en inglés como PEP, el cual entró en vigor inmediatamente.
“Con este programa termina el temor de tantos inmigrantes que vivían con el miedo de ser detenidos por la policía y por no tener una licencia de conducir eran entregados al servicio de inmigración”, dijo la activista Lydia Guzmán, representante del grupo Respect/Respeto.
El programa de Comunidades Seguras empezó como un plan piloto en el 2008.
En marzo del 2011, bajo la administración del presidente Barack Obama se extendió a nivel nacional, con la participación de más de 1,210 departamentos de policía a nivel local, de condado y estatal quienes cooperaban activamente con ICE. Esta cifra se elevó a 3,141 agencias en el 2013.
Un estudio realizado por The Jornal of Law and Economics, dado a conocer el pasado mes de noviembre, indicó que después de seis años de estar en vigor y más de 250,000 deportaciones, no se redujo la criminalidad, ni tampoco cumplió con su objetivo de volver más “seguras” a las comunidades.
En Arizona, agencias del orden como la oficina del alguacil del condado Maricopa, Joe Arpaio, utilizó este programa para crear un estado de “terror” entre la comunidad inmigrante, especialmente entre aquellos “sin papeles”, quienes en muchos casos por una simple infracción de tráfico terminaban enfrentando una orden de deportación.
El pasado 20 de noviembre, como parte del anuncio del presidente Obama de una orden ejecutiva que otorga un alivio migratorio a cerca de cinco millones de indocumentados, se informó también sobre la suspensión del programa de Comunidades Seguras.
El Gobierno Federal aseguró que PEP se enfocará en los “delincuentes” y no “en familias”, teniendo como prioridad la deportación de quienes tengan antecedentes criminales graves o aquellos que constituyen un peligro para la seguridad nacional.
ICE continuará trabajando en las cárceles para controlar las huellas digitales de los indocumentados detenidos y retener para su posterior deportación a todos aquellos que cumplan con el nuevo criterio.
“Nosotros seguiremos atentos a este nuevo plan y vigilaremos que los derechos de nuestra comunidad sean respetados”, finalizó la activista.