Más blancos que negros en estadios de Brasil
Mientras los estadios de Brasil se llenan de rostros blancos, más de la mitad de la población brasileña, se queda en casa
Casi el 70 por ciento de personas en el estadios eran blancas en el partido de Brasil vs. Chile. Crédito: Mexsport
La mayor parte de la población de Brasil es negra, pero en los estadios, sedes de los partidos de fútbol, destacan las personas con tinte claro en la piel.
En el partido de Chile contra Brasil, los rostros blancos llenaron el Estadio Mineirao y más del 90 por ciento de ellos eran ricos, mientras los residentes del área disfrutaban del juego en sus casas.
La falta de recursos económicos le impide a los brasileños apoyar a su selección desde las gradas de las instalaciones del Mundial.
Ser anfitrión de la Copa Mundial 2014 le ha costado bastante al país sudamericano –más de 6.5 billones de euros, según el diario inglés The Guardian- lo cual ha sido la causa de movimientos y protestas en contra del torneo.
Amplía al respecto Sin Embargo:
Ciudad de México – “A pesar de que más de la mitad de los brasileños son negros o mestizos, según el censo poblacional del 2010, y Brasil es el segundo país donde reside el mayor número de negros después de Nigeria, la mayoría de los asistentes al partido de octavos de final Brasil-Chile fueron blancos y ricos.
Según una encuesta de Datafolha, publicada ayer por el diario Folha de Sao Paulo, de 693 personas entrevistadas afuera del Estadio Mineirao, 67 por ciento eran blancos y 90 por ciento pertenecientes a la clase alta, la cual representa sólo el 15 por ciento de la población total. Datos que pueden constatarse en las tomas a las gradas transmitidas por televisión durante los partidos del mundial.
“La clase media brasileña que ascendió (con el gobierno del Partido de los Trabajadores en el poder y el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva) está muy poco representada en el estadio”, reveló el diario brasileño.
Según datos de AFP, la entrada más barata a los estadios cuesta medio salario mínimo, es decir, 330 dólares mensuales. En el partido del sábado, las entradas más baratas representaron apenas el 5% de las que se vendieron.
“Nadie a quien yo conozca encontraría boletos a su alcance”, afirmó al diario chileno La Tercera, Ana Beatriz Ferreira, quien es negra.
“No hay forma de que podamos comprarlos”, lamentó Marcos Carvalho de 18 años. “Simplemente veremos el partido en casa. Es todo lo que podemos hacer. Vemos que todos van al estadio y están felices, pero nosotros no iremos”.”.