García Padilla indicó que no decretó una moratoria en el pago de las notas del BGF, “con la intención de propiciar negociaciones constructivas” entre el agente fiscal y sus acreedores y a la luz de las conversaciones en curso.
“Estamos esperanzados que dichas negociaciones logren acuerdos justos para beneficio del pueblo de Puerto Rico”.
García Padilla declaró el estado de insolvencia del BGF, una semana después de que dijera que su administración hacía lo indecible para salvar al agente fiscal de un proceso de sindicatura y de haber puesto en marcha un plan de protección de efectivo, abriendo decenas de cuentas en Banco Popular y Citigroup.
Ello, con el objetivo de que una demanda o un proceso de sindicatura en el BGF no tuviera el efecto de congelar el dinero con el que se paga el salario de los empleados públicos o las pensiones de miles de jubilados.
De igual forma, la orden ejecutiva se produjo luego de que el pasado miércoles cobró vigencia la Ley de Moratoria de Emergencia y Rehabilitación Financiera de Puerto Rico, estatuto que concede poderes casi absolutos al mandatario y que se aprobó en un plazo de 48 horas.
(Por: Joanisabel González)